Los expertos alertan de que la cocaína puede producir psicosis permanente

PONTEVEDRA CIUDAD

En los últimos años, se ha convertido en el principal estupefaciente de consumo en Pontevedra Las drogas de diseño están comenzando a dejarse notar en la población joven, en los adolescentes
09 nov 2005 . Actualizado a las 06:00 h.El área de Benestar Social do Concello de Pontevedra abordó ayer el consumo de cocaína en una jornada que se celebró en el Pazo da Cultura y a la que asistieron distintos expertos en diversas áreas relacionadas con esta problemática social. Los especialistas resaltaron el hecho de que esta droga produce, «de por sí, psicosis», que suelen ser temporales a diferencia de una psicosis esquizofrénica. No obstante, en algunos casos se ha comprobado que el consumo de cocaína ha derivado en psicosis permanentes. En este sentido, Carlos Pino Serrano, médico psiquiátrica de la Unidade Asistencial de Drogodependencias do Concello de Pontevedra, matizó que se trata de una dolencia asociada a la cocaína «muy diferente del cannabis, que puede desencadenar cuadros psicóticos en personas predispuestas, pero se duda de la existencia de una psicosis cannábica como tal». Tal incidencia en la salud mental de los consumidores provoca que «el abortaje del abuso y dependencia de la cocaína tiene que ser integral», donde el «tratamiento farmacológico lo emplearíamos más para los trastornos inducidos por la droga, qué para lo que es la dependencia en sí que tiene que ser más biopsicosocial». Lo cierto es que la sociedad pontevedresa, paulatinamente, ha ido experimentando una modificación de los hábitos de los consumidores de sustancias estupefacientes. De este modo, tal y como apuntó Pino Serrano, «hace años se decía que la heroína era la droga de los pobres y estaba ligada a un cierto mundo marginal, mientras que la cocaína se asociaba a clases sociales más altas». Clases sociales Sin embargo, hoy en día la situación ha variado sustancialmente, «en parte debido al descenso de precio en el mercado de la cocaína». Tal situación está provocando que está droga cada vez tenga más aceptación entre los jóvenes y personas «que pertenecen a un estatus social, digamos, normal o, incluso, bajo». Esta circunstancia se ha traducido, asimismo, en que «el incremento de consumo de esta sustancia sea bastante alarmante». Las cifras así lo reflejan: «En el servicio municipal, uno de cada tres pacientes nuevos es por ingestión de cocaína. Estamos teniendo muchos casos de psicosis cocaínicas que hay que tratar en salas de psiquiatría», incidió Carlos Pino. En relación con esta cuestión, se ha constatado que el principal estupefaciente de consumo en Pontevedra es la cocaína, cuando antes era la heroína. Pino Serrano resaltó que «como droga secundaria ocupa el segundo lugar», además de insistir en que «los pacientes que acuden por cocaína suelen tener un grave problema de abuso y dependencia del alcohol. Ambos factores suelen ir unidos». Se da la circunstancia de que si en Pontevedra la heroína «ha pasado a un segundo plano», no ocurre lo mismo con la cocaína y otras sustancias estupefacientes. Así, la Unidade Asistencial ha detectado ya bastantes casos de consumos de drogas de diseño «en gente muy joven, casi adolescentes».