El Concello de Silleda presentó una contestación al juzgado de Pontevedra en relación a la demanda de Sumicons González, que reclama 81.760 euros por suministro. La alegación sostiene que no existe contrato de suministro, ni constancia que acredite por faxes o burofax una relación comercial. Además, no existe ningún albarán de recepción de los suministros, por lo que la alcaldesa se pregunta «por que precisamente esta empresa fai agora esta reclamación e por que non existe constancia dunha relación comercial tan prolongada e frutífera».
Añade que la firma muestra como prueba unas pocas facturas presentadas por el registro del Concello; pero la mayoría presentan un sello del Concello, una supuesta rúbrica ilegible -que alegan es del anterior alcalde- con la expresión 'recibido e conforme'. La fecha del conforme en las facturas es el 14 de junio del 2007, momento en el que Fernández Viéitez estaba en funciones: «É unha situación totalmente alucinante porque non aparecen albaráns firmados, non hai documentos pedindo o material, non meten as facturas por rexistro e, o máis curioso, no Concello se lle conforman as facturas cunha sinatura do alcalde dous días antes de que eu tomase posesión».
Así las cosas, la alcaldesa lamentar «pleitear cun veciño, pero imos defender o interese xeral por riba de calquera outro». La firma dice que la deuda de 2001 a 2005 eran 90.021 euros, pero cobró 4.041 y otros 4.220 se le compensaron no cobrándole impuestos, pero la alcaldesa dice que no está acreditado.