Larga vida a la discoteca Daniel de Pontevedra que tardó solo un mes en hallar relevo a 40 años de historia

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Lelé de Noite le da el relevo a la sala con más solera de la ciudad y evidencia la resistencia del ocio nocturno

02 sep 2021 . Actualizado a las 14:09 h.

El ocio nocturno muestra su músculo en la ciudad. Quiere ir poco a poco recuperando el pulso de la noche que la pandemia le arrebató hace más de año y medio. Empieza a haber esos brotes verdes que marcan el final de una crisis. En este caso esos brotes son una tímida, pero deseada vuelta a la normalidad. Y la noche forma parte de ella. Si hace una semana era la sala Karma la que programaba sus dos primeros conciertos tras 17 meses cerrados, ahora es la reapertura de Daniel, la discoteca con más solera de la ciudad, que vuelve bajo el nombre de Lelé de Noite. El covid le obligó a cerrar sus puertas en marzo del 2019 y desde entonces no había vuelto a abrir.

El pasado mes de julio, su propietario, José Manuel Malleiro, bajó la verja definitivamente porque tocaba cuidar la salud y no pensar en reaperturas. Colgó en la puerta el cartel de se alquila y espero que alguien quisiese recoger su legado. Con ese gesto decía adiós a casi 40 años de trabajo. El adiós de una de las discoteca más emblemática de la ciudad, en la que el actual rey Felipe VI se tomó sus primeros cubatas cuando era un alumno de la Escuela Naval, se topó con Rafael Rúa. El responsable del Lelé y el Lelé II, dos locales de hostelería en Marín y Pontevedra, respectivamente, comentó con unos amigos lo que había pasado con Daniel. Una conversación informal de sobremesa fue el primer paso de una negociación que le llevó a coger el traspaso del local en apenas unos días. «Comentaron de broma que había cerrado Daniel, que era una oportunidad y lo que empezó de coña es ahora Lelé de Noite», explica Rúa, que asegura que cuando se metió en la aventura «muchos me decían que estaba chiflado, que como lo hacía en un momento como este, que era una aventura». Pero él, que contaba con el apoyo de su familia, no lo dudó.

Negoció el alquiler y se quedó con lo que hasta ahora era la discoteca Daniel. Cambió el cableado del local, dio una mano de pintura, cambió los espejos del local (serigrafiado con el nombre de la sala de fiestas) y cambió la cartelería. Hoy abrirá sus puertas con una estética similar que llevará a los nostálgicos a recordar los años dorados de la única discoteca de la ciudad. «Cambiaré algo el estilo de la anterior sala, pero esto está abierto a todas las edades, desde jóvenes a mayores», apunta Rafael Rúa.

Para todas las ideas

Su cabeza es estos días un hervidero de ideas y de planes para la sala ubicada en el sótano del edificio entre Benito Corbal y Daniel de la Sota. «Aunque estará abierta para el que quiera venir, haremos jueves universitarios, fiestas temáticas los viernes y pondremos los sábados por la tarde como guateques de 17 a 22 horas», subraya Rúa. Asegura que la idea es que en ese horario de tarde no se sirva alcohol al estar abierta a menores. El nuevo gerente reconoce que está tan «asustado como ilusionado». Arrancar con el aforo al 50 % y unas medidas covid que «cumpliremos a rajatabla» son una «gran responsabilidad» en un negocio en el que trabajarán 13 personas. «Para mí haber llegado hasta aquí es un logro, yo soy un camarero que trabaja para vivir. Ahora solo queda ver como reacciona la gente a la apertura, que espero que sea muy bien porque hemos puesto mucha ilusión», explica Rafael Búa.

El Lelé de Noite es junto a la sala Jackson las únicas discotecas que quedan en el centro de la ciudad. Estas dos se unen a la sala Karma, que esta noche retoma los conciertos con Arantxa Treus a las 22.00 horas y mañana viernes actuará Kings of the beach a las 23.00 horas. «Para el sábado no tenemos programado ningún concierto, pero es probable que ya abramos normal y corriente», explica Marcos Rivas, que está satisfecho con la respuesta del sábado pasado.

La música en vivo también está en los planes de Rafael Rúa, que cree que reinventarse es clave para mantenerse activo. «Tendremos dúos o tríos en la discoteca y además daremos clases de baile latino y esperemos que podamos de baile gallego», comenta el dueño del Lelé de Noite. Tanto él, como otros empresarios empiezan a dar pasos hacia esa normalidad que trae septiembre.