Primeras licencias en Pontevedra para apartamentos turísticos en bajos comerciales

PONTEVEDRA CIUDAD

En la ciudad se permite este uso además de en casas unifamiliares y edificios enteros
24 jul 2023 . Actualizado a las 13:12 h.La ciudad de Pontevedra estrenará el próximo mes de agosto tres apartamentos de uso turístico de una llave ubicados en lo que fue un bajo comercial de la calle Santa Clara. El proyecto que impulsa el comerciante Sesi Filgueira cuenta con una «doble licencia» de Turismo de la Xunta y del Concello. Desde el gobierno local no ofrecen datos concretos, pero, a preguntas de La Voz, sí indican que son de las primeras que se otorgan en bajos.
Se abre una opción más, no exenta de polémica, para los propietarios. Según datos de este mismo mes del Rexistro de Empresas e Actividades Turísticas (REAT) de la Xunta, el número de viviendas de uso turístico (VUT) no deja de crecer. Bastan tres ejemplos. En la provincia de Pontevedra son ya 9.431, de las que casi el 28 % (2.630) están en Sanxenxo, uno de los epicentros del turismo en las Rías Baixas. En el municipio de Pontevedra, donde en teoría las viviendas de uso turístico solo se admiten si se ubican en casas unifamiliares, bajos o si el edificio entero tiene ese uso, están dadas de alta 409. Esas cuatrocientas viviendas de uso turístico pueden parecer pocas para una capital de provincia, pero hay que tener en cuenta que en abril del 2022 eran 299.
En todo caso, en Pontevedra las viviendas de uso turístico que operan son más y también las hay fuera de esos emplazamientos que permite un plan de urbanismo (PXOM) del año 1989.
Hay quien sostiene que autorizar viviendas o apartamentos de uso turístico en bajos comerciales es un camino no exento de riesgos. Desde la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga), que representa a los propietarios de estos inmuebles en la comunidad, consideran que se puede distorsionar el modelo y acabar muriendo de éxito. La reflexión la hace su presidenta, Dulcinea Aguín: «En el caso de los bajos comerciales no vale todo, no debería haber tarifa plana. Algunos solo tienen una puerta al exterior como único elemento de ventilación». Sabe de lo que habla y expresa su preocupación porque en Sanxenxo en el último año han proliferado en varias calles y hay casos de bajos sin ventilación y por donde pasan conducciones de gas y demás instalaciones.
Desde Aviturga insisten en que hay que tener claro el modelo que quiere Galicia y no distorsionarlo. «Deberíamos apostar por un modelo de calidad que deje rentabilidad en el territorio», subraya Dulcinea Aguín.
También hay quien va más allá y considera que habilitar viviendas o apartamentos de uso turístico en bajos sin apenas ventilación es permitir «ratoneras» que van a ser ocupadas sobre todo por «chavalada».

Sesi Filgueira, promotor de Ponteloft: «No queremos alterar la convivencia del barrio, sino que los vecinos también participen»
Reinventarse para seguir ganándose la vida y buscarse la jubilación. Así cuenta Sesi Filgueira, dueño de la tienda de textil de hogar Olbe, cómo se metió en un proyecto de tres apartamentos turísticos que prevé abrir este agosto en la calle Santa Clara de Pontevedra. «Las ventas del pequeño comercio bajaron y tener dos locales con el mismo producto en la misma calle no era viable, aunque los bajos fueran nuestros», explica. Hace dos años, en julio del 2021, trascendía una sentencia que confirmaba la clausura de un piso de uso turístico en la ciudad por parte del Concello por ubicarse en una quinta planta. Al saber que desde la Administración local sí se permite el uso turístico en bajos, Sesi y su familia vieron una alternativa de negocio para la tienda que habían abierto sus padres, Ángel y Olga, en 1979. «Fui a hablar con Turismo de la Xunta y también con el Concello para ver si era posible y me dijeron que sí, con unas condiciones, que no se puede vivir en ellos al ser de corta estancia y ni censarse», recuerda.
Inicialmente, iban a ser dos los apartamentos de alquiler de Ponteloft Apartamentos a pé de rúa, pero al final los profesionales de Nan Arquitectos dijeron que casi era más fácil habilitar tres que dos. Solventado el papeleo, el lunes de Pascua arrancaban las obras en un bajo de 120 metros cuadrados y 17 metros de fachada a cargo de la constructora ASC. Dos de los apartamentos comparten vestíbulo de entrada y el tercero es independiente. Estarán totalmente equipados y cada uno es para cuatro personas (2+2). Sesi admite que las obras de acondicionamiento llevan algo de retraso, aunque los operarios trabajaron todas las jornadas. «En diez días debería estar todo listo para abrir», comenta. La inversión superará los cien mil euros. Él y su familia apuestan por este tipo de negocio porque no saben durante cuánto tiempo será Olbe rentable. Cuando no lo sea, cerrarán la tienda.
El comerciante insiste en que la familia quiere que Ponteloft no solo «no altere la convivencia del barrio de Santa Clara, sino que sus residentes participen de él». Por ello, están en conversaciones con distintos negocios del entorno —gimnasio, clínicas de fisioterapia, supermercado...— para ofertar algún tipo de acuerdo para los clientes de los apartamentos. La ropa de cama será de calidad y servida por Olbe, claro, y podrá incluso comprarse.