La tubería partirá del este de Montalvo y no habrá obras en playas en verano
19 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La mejora de la depuradora de Paxariñas, en Sanxenxo, incluirá la conexión de las redes de saneamiento ya ejecutadas en las parroquias poienses de Raxó y Samieira, así como la demolición del emisario submarino actual, que no cumple su función, y la construcción de uno nuevo que se adentrará 1,2 kilómetros en la ría de Pontevedra. El informe de impacto ambiental se publicó ayer en el Boletín Oficial del Estado y detalla esta actuación, que llevará a cabo Acuaes, a través de un convenio suscrito en su día con los Concellos de Sanxenxo y Poio. Una vez que se liciten las obras y se comiencen los trabajos, el cronograma de Acuaes contempla un plazo de ejecución de treinta meses, de los que 18 serán de obra civil y otro año más de puesta en marcha y pruebas del funcionamiento de todo el sistema ambiental.
El objetivo de estos trabajos es mejorar la calidad del agua en la ría, poniendo fin a los vertidos directos al mar desde Poio y A Granxa, reduciendo también los alivios cuando se producen lluvias fuertes en el litoral sanxenxino y garantizando un tratamiento más adecuado del efluente. El proyecto ha sido modificado varias veces en su tramitación administrativa, con el fin de «evitar impactos ambientales significativos». Hasta doce departamentos estatales y autonómicos han hecho valer sus apreciaciones, destacando Costas y Augas.
En Paxariñas se ampliará la depuradora, aumentando su caudal asumible, además de dos líneas de tratamiento biológico, cuatro decantadores secundarios nuevos, dos líneas de desinfección ultravioleta, un nuevo edificio desodorizado de fangos activos con tambores espesadores, tres líneas de deshidratación y un silo para almacenar el fango adicional. Las obras en la depuradora implicarán la inclusión al actual recinto de una parcela de 8.000 metros cuadrados.
También se mantendrá la actual red del alcantarillado en Raxó y Samieira, que se conectará con el colector general que va a Paxariñas. Así se acabarán los vertidos al mar. Se harán nuevos bombeos en diversos puntos del litoral de Sanxenxo y se sustituirá el colector de Portonovo. Los alivios estarán en Raxó, Areas, Nanín, Sanxenxo, O Espiñeiro (Portonovo) y Montalvo.
Profundidad de veinte metros
En cuanto al emisario submarino será totalmente nuevo. El tramo inicial medirá 600 metros y transcurrirá enterrado hasta alcanzar una profundidad de diez o doce metros en la ría. El resto hasta llegar a una longitud total de 1,2 kilómetros irá apoyado sobre el fondo marino con lastres de hormigón para que no se mueva. La previsión técnica es que la descarga del efluente se haga a una profundidad de veinte metros.
El ámbito que mejorará su saneamiento es parte de Poio y todo Sanxenxo hasta Montalvo. De forma expresa, en el documento publicado en el BOE se condicionan los trabajos a que «deben evitarse vertidos directos en arenales, playas y en la red hidrográfica, así como la realización en ellos de actuaciones durante la temporada de baño». Es decir, no podrá ejecutarse obra en las playas entre el 1 de junio y el 30 se septiembre.
Protección de las aves
El trazado del emisario submarino «comienza al este de la playa de Montalvo, donde atraviesa un pequeño acantilado, continuando por la zona del arenal» y entrando así en el agua de la ría. Dado que este ámbito está amparado por diversas figuras de protección tanto en tierra como en el mar, se exigirá a la empresa adjudicataria una serie de requisitos y estrictos condicionantes.
Al tratarse de áreas de especial interés para las aves, tanto de paso como invernantes, antes de comenzar las obras, «se buscará asesoramiento por parte de ornitólogos locales, ajustándose, en caso de ser preciso, el calendario y la programación de las obras evitando los períodos más sensibles para las aves».
La EDAR de Sanxenxo llega a su límite en verano y dos parroquias de Poio vierten al mar
El informe estatal no se anda con miramientos en su evaluación de la situación actual del saneamiento en este tramo de la ría pontevedresa. Se especifica que dos parroquias de Poio echan sus aguas sucias directamente al mar y que la EDAR de Paxariñas, en Sanxenxo, no da abasto en verano para tratar el caudal que recibe. Ya por sí solas estas dos circunstancias justifican la intervención en esta infraestructura cuanto antes.
El documento ambiental incide: «Los sistemas de saneamiento de Sanxenxo y Poio, en la zona de Raxó-Samieira, presentan déficits que se acentúan por la elevada ocupación poblacional en época estival». Se precisa que Raxó y Samieira, así como el lugar sanxenxino de A Granxa «tienen un sistema de colectores que recogen las aguas residuales y las vierten al mar a través del emisario submarino sin tratamiento previo». Sobre la depuradora de Paxariñas, se precisa que «se encuentra al límite de su capacidad en época estival». Y por si no fuese poco, se aclara que esta EDAR utiliza un emisario submarino de dos kilómetros, que sin embargo, no cumple con su trabajo. Este emisario «está al límite de su capacidad hidráulica y presenta una rotura produciéndose el vertido en un punto intermedio a un kilómetro de la costa».
Asimismo, el constante crecimiento inmobiliario de este entorno también es causa de preocupación con el actual sistema de depuración. «Se están tramitando en la zona desarrollos urbanísticos que agravarán la situación».