Amelia Earhart sobrevuela Google en un nuevo doodle que celebra el 115 aniversario de su nacimiento

Amelia Earhart, nacida hace hoy 115 años, es una auténtica leyenda de la historia de la aviación y, sobre todo, de la aviación estadounidense. Intrépida y osada, Amelia Earhart, a la que hoy Google rinde tributo en su página principal con una ilustración a modo de doodle que celebra su aniversario, desapareció en julio de 1937 en algún lugar del Pacífico Sur mientras intentaba convertirse en la primera mujer en completar una vuelta aérea alrededor del mundo siguiendo la línea ecuatorial. «Por favor debes saber que soy consciente de los peligros, quiero hacerlo porque lo deseo. Las mujeres deben intentar hacer cosas como lo han hecho los hombres. Cuando ellos fallaron sus intentos deben ser un reto para otros». Estas fueron las últimas palabras que Amelia Earhart, homenajeada hoy entre las letras de Google en un doodle junto a su característica avioneta, escribió a su marido George antes de embarcarse en la gran aventura que acabó con su vida. Hace 75 años, Amelia Earhart, pionera de la aviación estadounidense tras haber conseguido ya varios vuelos récord, se subió a un avión junto con su ayudante Fred Noonan. Después de un último mensaje interceptado cerca de las Islas Nukumanu, en el que Amelia Earhart, protagonista hoy del doodle de Google, avisaba de que se estaba acabando el combustible de la avioneta, nunca se supo nada más de Earhart y su acompañante. La infructuosa búsqueda no arrojó luz sobre el trágico destino de Amelia Earhart, cuya desaparición, uno de los grandes misterios de la historia de EE. UU., ha dado pie a todo tipo de suposiciones y especulaciones sobre la mujer que hoy saluda desde el doodle a los usuarios de Google.

Una mujer que cambió las reglas

Amelia Earhart ya se había proclamado en 1928 la primera mujer que había cruzado el Atlántico por aire, a pesar de que solo lo hizo como acompañante. Aún así, la aviadora retratada hoy entre las letras de Google en el doodle se convirtió ya entonces en una heroína nacional. Este vuelo transoceánico, que en 1932 Amelia Earhart repitió ya como aviadora, le abrió las puertas a otros nuevos hitos y colocó a Amelia Earhart en una situación que le permitió abogar públicamente por los derechos de la mujer. Amelia Earhart, última homenajeada por Google en un doodle, se convirtió en una de las figuras más aclamadas de la sociedad estadounidense y, por ello, se postuló como la mejor candidata para realizar la última y más arriesgada aventura de la aviación, un vuelo alrededor del mundo que, tristemente, acabó en tragedia.

Después de haber volado 33.000 millas, más de dos tercios de la travesía, y acariciando el éxito con la punta de los dedos, el 2 de julio de 1937 la avioneta Electra pilotada por Amelia Earhart dejó de emitir la señal a través de la cual se le seguía el rumbo en algún lugar del océano Pacífico. A pesar de los cuatro millones de dólares invertidos en la búsqueda de la escogida por Google para decorar hoy con el doodle su portada, que autorizó el presidente Roosevelt, en la que se utilizaron 66 aviones y 9 barcos de la marina, nunca se encontró rastro de Amelia Earhart, ni de su acompañante Noonan, ni de su avión.

La trascendencia de los logros conseguidos por Amelia Earhart fue tal que su vida, digna de una superproducción de Hollywood, dio el salto a la gran pantalla en el año 2009, con una película protagonizada por Hilary Swank y titulada Amelia, el vuelo final.

Más de un siglo después, una nueva expedición con alta tecnología submarina ha retomado la búsqueda de los restos del avión estrellado de Amelia Earhart, mientras la visionaria aviadora vuelve a estar de actualidad gracias al doodle de Google situándose entre los puestos más altos de la lista de temas más comentados del momento en Twitter.

Los doodles, los peculiares homenajes de Google

El doodle en honor a Amelia Earhat continúa una ya dilatada lista de doodles con los que Google rinde homenaje a personajes célebres, fechas relevantes o importantes acontecimientos históricos. Modificando de forma original y creativa las letras de su logo, Google retoma con este doodle una tradición nutrida con otros doodles, entre los que se encuentran el doodle dedicado a Gideon Sundback, inventor de la cremallera; el creado en honor del médico Ramón y Cajal; el doodle que homenajeó al egiptólogo y arqueólogo Howard Carter, descubridor de la tumba de Tutankamon; el tributo interactivo a Robert Moog y su gran invento, el sintetizador; el doodle con el que Google recordó a Peter Carl Fabergé y sus Huevos de Pascua, el doodle creado en homenaje a Alan Turing, el gran matemático padre de la informática moderna, que simulaba una máquina Turing y ofrecía a los usuarios de Google una serie de enigmas que debían ir superando en el propio doodle para ser recompensados con las letras del buscador, o, el más reciente, el doodle ideado en honor al pintor Gustav Klimt en el 150 aniversario de su nacimiento. Con su último doodle, Google se acuerda de Amelia Earhat, una mujer que, gracias a su hitos y debido al misterio que planea sobre su desaparición y su muerte, se ha convertido en una auténtica leyenda.

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