La reedición de versiones diminutas de las consolas de videojuegos más populares de la historia ha gozado de cierto éxito en los últimos años. Nintendo abrió la veda hace ya siete años (2016) con la NES Classic Mini, a la que luego seguirían la Super NES Classic, la PlayStation Classic, la Sega Megadrive Mini y Mini 2 e incluso mini ordenadores como The A500 Mini (versión del Amiga 500) o The C64 (Commodore 64).
Ahora llega la que puede considerarse la consola retro definitiva, pues es casi la madre de todas las anteriores, además de haberse convertido por derecho propio en una de las máquinas de gaming más legendarias de la historia: la Atari 2600. Lanzada en 1977, fue el primer sistema doméstico de videojuegos que alcanzó un éxito masivo, apoyado en su modelo de cartuchos intercambiables, y a lo largo de su vida útil vendió más de 30 millones de unidades. Legendaria fue también su caída, a causa, entre otras cosas, del lanzamiento de juegos desastrosos, como la adaptación de E.T. El extraterrestre o una versión de Pac-Man de mala calidad, que llegó a poner a la industria de los videojuegos contra las cuerdas en 1983, antes de que la Gran N (Nintendo) llegara al rescate.
Han sido la propia Atari, que sobrevive en manos de una compañía francesa del mismo nombre (antes Infogrames), y Plaion, líder mundial en edición y desarrollo de videojuegos, las que han anunciado la nueva Atari 2600+, que será lanzada en todo el mundo el 17 de noviembre por 119,99 euros.
La Atari 2600+ incluirá un cartucho con diez de los títulos más importantes de la compañía, como Adventure y Missile Command, pero será compatible con cientos de juegos antiguos de las Atari 2600 y 7800. La maquina tiene el mismo diseño del sistema de videojuegos VCS (Atari Video Computer System) de cuatro interruptores, lanzado en 1980, y reproduce fielmente desde el tacto de los pulsadores metálicos al panel frontal de madera veteada. Para revivir la experiencia de juego de los años 70 y 80 se incluye el mando joystick CX40+, idéntico al original. Eso sí, el hardware es contemporáneo, con salida HDMI, alimentación USB y posibilidad de elegir múltiples resoluciones de pantalla.