El local fue adquirido en el 2000 por la Diputación dentro de un programa para crear una red social
26 dic 2009 . Actualizado a las 02:00 h.El local vecinal de Pelamios abrirá por fin sus puertas a partir del día 9 de enero, fecha prevista inicialmente para la inauguración, según comentó la presidenta de la Asociación de Veciños As Brañas de Andrés, Dolores Alende. La portavoz vecinal mostró su «alegría» tras años de espera y, sobre todo, después de que durante el último año pudieran ver el local totalmente terminado y sin poder usarlo debido a la necesidad de resolver una serie de trámites administrativos.
El nuevo centro social de Pelamios será propiedad del Ayuntamiento, que asumirá una serie de gastos de mantenimiento; pero será la asociación de vecinos la que se encargue de la programación de actividades. Dolores Alende espera que, en las próximas semas y, de hecho, ya han comenzado a llevar parte del material de la asociación, que hasta ahora era guardado en casas particulares ante la falta de local.
El centro social de Pelamios estaba incluido en el programa provincial del año 2000, que promovido por el entonces vicepresidente de la Diputación y concejal del PP en Santiago, Dositeo Rodríguez, pretendía crear una red de centros sociales para ser utilizados y gestionados directamente por los vecinos. De aquel programa, Santiago recibió la inversión para adquirir o construir los locales de A Rocha, Villestro, San Xoán de Fecha, Lavacolla y Pelamios. Los tres primeros se pusieron en marcha hace algún tiempo, aunque finalmente el Concello asumió la gestión dado que las asociaciones vecinales carecían de recursos para su mantenimiento. Dentro del acuerdo de cesión, la Diputación se comprometió a contribuir con recursos económicos para el mantenimiento de los locales.
En el caso de Lavacolla y Pelamios, las obras de reforma de las casas adquiridas para ser locales sociales chocaron con innumerables problemas. En Pelamios, las obras de rehabilitación parecen haber concluido; aunque en las últimas lluvias se ha constatado algunos problemas en el inmueble vinculados con el nivel de agua, que también afecta a la capilla de Pelamios. El de Lavacolla, sin embargo, tuvo aún peor suerte y fue necesario espera a la modificación del Plan Xeral para cambiar la calificación del inmueble, que no admitía su uso como centro social al estar asignado como residencial. Desde hace unos meses se llevan a cabo obras de reforma y acondicionamiento en este inmueble, con el fin de que su inauguración pueda celebrarse el próximo año. Cuando Lavacolla disponga de local se habrá cerrado un expediente de diez años.