Carlos Sainz ya tiene su Dakar. El piloto madrileño se coronó ayer en Buenos Aires después de aguantar las embestidas del catarí Al Attiyah, también de Volkswagen, en la última etapa. Se convierte así en el primer español que gana esta mítica carrera en categoría de coches, tras los éxitos en motos de Marc Coma (2006, 2009) y Nani Roma (2004).
Sainz tenido que esperar a su cuarta participación, pero Sainz une el Dakar sudamericano a un palmarés en el que ya figuraban dos ediciones del Mundial de ralis (1990 y 1992) y cuatro subcampeonatos. Fue líder de la general desde la quinta etapa y se impuso de forma parcial en dos jornadas.
Liberados de toda consigna de equipo, el español y Al Attiyah iniciaron la última especial con una diferencia mínima de tiempo. En un recorrido sumamente rápido, en el que resulta altamente complejo realizar adelantamientos, el catarí arrancaba con una misión clara: lograr más de 2 minutos y 48 segundos sobre Sainz para apartarlo del primer puesto del podio.
Al Attiyah, que exigió el máximo a su Race Touareg, arañaba 18 segundos tras el paso por el primer punto cronometrado (kilómetros 121). Por lo tanto, a solo 81 kilómetros de cumplir el sueño, Sainz manejaba una ventaja virtual de 2 minutos y medio en la general. Sin prisa pero sin pausa, se aferraba a esta diferencia sin ceder al pánico. Un error, una avería o un pinchazo lo habría desbaratado todo. Y eso ya hubiera sido demasiado para el historial de un piloto perseguido por la mala fortuna.
Triunfo ajustado
Después de ver cómo se le escapaba la victoria en el 2007 y en el 2009, Sainz rubricó su primer éxito en el Dakar de forma muy ajustada. Tras 4.806 kilómetros de tramos cronometrados y con una velocidad media de 101,8 kilómetros por hora, la diferencia que separó a los dos Tuareg fue solo de 2 minutos y 12 segundos. En la jornada final, Al Attiyah ganó la etapa e invirtió un tiempo de una hora, 19 minutos y 42 segundos, apenas 36 segundos menos que el madrileño. «Hemos hecho una competición rápida, pero muy inteligente. Es un día importante. Estoy muy contento, se me ha quitado un peso de encima», confesó el ganador.
En motos, el triunfo fue para el francés Cyril Despres, que conquistó así su tercer Dakar. El portugués Rubén Faria se impuso en la última etapa.