La prueba del olvido que sufren los proyectos alternativos a la autopista AP-9 y a la propia nacional 550 son los Presupuestos del Estado. Las cuentas por las que se rige este año el Ministerio de Fomento confirman que los problemas de la red viaria que vertebra los municipios de Ordes, Oroso, Ames, Teo y Padrón no están en la agenda ministerial, que consignó 5.000 euros para la variante de Ordes y el doble para el tramo de Milladoiro. Ya fuera del entorno compostelano, añade 10.000 euros más para la variante entre Pontecesures y Valga. Y aunque en años anteriores las reservas económicas fueron más cuantiosas, solamente se emplearon en la ejecución de parte de la variante padronesa. La AP-9 está pendiente de una ampliación que se estima que rondará los cien millones.