El 46,1 % de los compostelanos valora como buenas las autopistas y autovías existentes en la provincia de A Coruña y otro 1,7 % considera que son muy buenas. La encuesta de Sondaxe revela que son muchos menos, un 25,9 %, los que las catalogan como malas y que solo un 7,6 % las ve como muy malas, mientras que hay otro 14,1 % que estima que son simplemente regulares.
Ese 47,8 % de santiagueses que califica como buenas o muy buenas las vías de alta capacidad está por encima de la media provincial, que es del 46,1 %, pero detrás de Ferrol, donde el nivel de máxima satisfacción alcanza al 55,8 % de ciudadanos, y de A Coruña, ciudad en la que es del 48,9 %. Sí está muy por encima de Ribeira y su zona de influencia, donde son solo un 35,5 % los que las catalogan como buenas y muy buenas, y mucho más que en Carballo, donde nadie está plenamente contento con la calidad de autovías y autopistas y solo un 22,2 % dice que son buenas.
En lo que a valoraciones negativas se refiere, en Santiago un 33,5 % de los encuestados considera que las autovías y autopistas coruñesas son malas o muy malas, por encima de la media provincial, que es del 28,8 %, y solo por detrás de Carballo, a la cabeza en insatisfacción con el 48,4 % de ciudadanos que suspenden a las carreteras. Este ránking se completaría con A Coruña (27,5 %), Ferrol (24 %) y Ribeira, que es la zona en la que es menor la cantidad de personas que creen mala la calidad de las vías de alta capacidad, solo un 20,5 %.
En cuanto a si son o no suficientes las autovías y autopistas existentes, el 82,4 % de los compostelanos cree que sí, por solo un 16,1 % que estima que son necesarias más. Es el porcentaje más alto de toda la provincia, por encima del 76,2 % de Ferrol y el 75,9 % de Ribeira. En A Coruña son un 65,4 % de los encuestados los que creen que ya no hacen falta más vías de alta capacidad, una cifra que tiene su mínimo en Carballo, donde se sitúa en el 52,7 %. La media provincial es del 68,3 %. En el caso de Compostela, el único proyecto pendiente es el de la autovía de Lugo, ya que con el resto de ciudades gallegas está comunicada bien por la AP-9 o por la autopista de peaje que va a Lalín (AP-53) y que se convierte en autovía libre de pago en la capital dezana y continúa hasta Ourense (A-53), donde engancha con la autovía del Noroeste que va a Madrid. No es de extrañar que la zona de Carballo, con solo una autopista y de peaje, la que va a A Coruña, sea donde se demanden más carreteras.