Solía ser vuestro borracho favorito, bueno para echaros unas risas más, luego se nos agotó la suerte y, la suerte (la suerte de defender, defender, defender que comer ya habrá quien coma), era lo único que teníamos». El santo y seña de este equipo ha sido anotar 75 puntos (desde los 75,18 de la temporada 12-13; 74,94; 72,56; 75,41 y 75,56 ésta) y defender. En la temporada 2012-13 encajó menos de 74 puntos por partido y se clasificó para el play off; la temporada pasada recibió casi 79 puntos por partido y, como decía la pancarta que sostenía el equipo en aquel montaje de Rosmadoiro: «Pa’haberse matao». Este año estamos encajando 81 puntos por partido. Frente a Estudiantes nos condenaron las pérdidas de balón; con Gran Canaria fue Báez jugando abierto y reboteando ofensivo; contra el Betis las penetraciones de Stojanovski… y sí hemos visto repetido al base rival haciéndonos daño, casi siempre a partir del pick and roll (y cuidado que el pick and roll lo defienden cinco y no solo los jugadores directamente implicados): Larkin, White, Cvetkovic, Diot y Albicy fueron los mejores jugadores de sus equipos. Y luego queda un dato incontestable, fue morirse Leonard Cohen y encajar 90 puntos contra Gran Canaria y 91 contra Andorra. Como decía Johan Cruyff, «si quisiera que me entendierais, me explicaría mejor».