
El club activa el radar de mercado en previsión de acontecimientos, ya que Matulionis es duda para el domingo y Urtasun aún no está
15 dic 2016 . Actualizado a las 12:33 h.El Obradoiro pierde a uno de los jugadores que atraviesan un mejor momento de forma para afrontar el tramo más duro del calendario. Mickey McConnell notó un punto de dolor en el gemelo de la pierna derecha en el entrenamiento del martes. Parecía un percance sin mayor importancia, pero las pruebas médicas revelaron al día siguiente una rotura fibrilar que lo tendrá apartado de las canchas aproximadamente un mes.
Osvaldas Matulionis está ejercitándose al margen del grupo por unas molestias en un pie. Es duda para el domingo, aunque probablemente podrá jugar. Y Urtasun sigue en la fase final de su puesta a punto. Trabaja con el grupo, pero todavía le falta el último paso de la recuperación, que se está resistiendo.
Así las cosas, el club ha activado el radar de mercado, por si tuviese que intervenir. La semana próxima dispondrá de datos más precisos sobre la evolución de la lesión de McConnell y su tiempo de recuperación. En función de las expectativas sobre el estado físico del base y los dos aleros decidirá si busca un relevo temporal, bien un director de juego o bien un escolta que también pueda llevar las riendas del equipo.
McConnell ya no viajará con el equipo a Madrid. Y, de acuerdo con los plazos estimados para su recuperación, también se perderá el último partido del año en Sar, el día 28 frente al Bilbao; el de Málaga del día 30; y el de Barcelona del 8 de enero, el penúltimo de la primera vuelta.
Enero, mes clave
Después llegará otro segmento en el calendario en el que el Obradoiro se enfrentará a rivales que se están moviendo en la misma zona de la clasificación, excepto el caso del Tenerife. El colectivo de Moncho Fernández recibirá sucesivamente al Fuenlabrada y al conjunto isleño, visitará al Estudiantes y se medirá en Sar al Manresa.
De momento, el equipo se centra en su compromiso más inmediato, ante el Real Madrid, que juega hoy partido de Euroliga ante el Darussafaka. Viajó sin Llull, Thompkins ni Randolph, que está pendiente de pruebas médicas para determinar si sufre una rotura fibrilar y que, previsiblemente, también será baja el domingo. En el caso del base y del otro pívot, Pablo Laso apuntó antes del desplazamiento que prefería que se quedasen por precaución. Y podría optar por la misma vía en la Liga Endesa, toda vez que tiene en plantilla catorce jugadores.