Un paciente psiquiátrico propinó patadas y golpes al personal de seguridad en la tarde del lunes
20 mar 2019 . Actualizado a las 18:25 h.Dos vigilantes de seguridad del Hospital Clínico sufrieron cortes y contusiones en la tarde del lunes al tener que intervenir para contener a un paciente agresivo en la zona de psiquiatría del centro. Los dos fueron atendidos en urgencias y no necesitaron pedir la baja, pero desde UGT admiten que el número de incapacidades temporales es alto entre el personal de seguridad de los hospitales.
El sindicato asegura que la plantilla del personal ha bajado en los últimos años, y actualmente cuatro trabajadores deben encargarse por las tardes de controlar cualquier incidencia que ocurra en el Clínico y en el Gil Casares.
UGT solicita a la dirección del CHUS que adopte las medidas necesarias para adecuar la plantilla de vigilantes a las necesidades reales del complejo hospitalario, ya que, insiste, para garantizar la protección de los trabajadores sanitarios y la de los demás usuarios, primero se debe amparar a los trabajadores encargados de realizar ese cometido. La gerencia de Santiago asegura que ha incorporado muchas de las medidas de protección que piden los sindicatos, con una dotación de personal, además, adecuada a las necesidades. El número de intervenciones del personal de seguridad, insiste el CHUS, no ha aumentado en los últimos años.
Los responsables del área sanitaria recuerdan que desde mediados del 2018 se llevó a cabo un estudio e implantación de una red de vigilancia de casi cien cámaras de seguridad que completan las existentes, y que cuentan como las señalizaciones y permisos reglamentarios.
Los vigilantes que trabajan en esta gerencia fueron los primeros en contar con nuevos materiales para desarrollar su trabajo con más seguridad, como guantes anti corte, chalecos anti trauma, escudos de protección tipo policial y hasta esprays de defensa personal, para lo que incluso fue preciso pedir autorización expresa a la Dirección General de la Policía.