Javier Nicolás, nuevo gerente de As Cancelas, en Santiago: «Lo digital gana peso, pero los centros comerciales son ocio y socialización»

«Llevo aquí dos meses, pero ya he tenido tiempo de hacerme al proyecto y a la ciudad. ¡Hasta de buscarle colegio a los niños!», cuenta Javier Nicolás, nuevo gerente de As Cancelas, que asume el mando del centro comercial en un momento, dice, «de mucha intensidad». ¿Sus principales retos? Mantener un proyecto ya consolidado y estrechar sus vínculos con Santiago y su entorno.

-Pandemia, restricciones de movilidad y cambios en el consumo. ¿A qué retos se enfrenta con la dirección de As Cancelas?

-El próximo año cumplimos una década y eso son diez años de consolidación, pero también de una fidelización que creo que hemos conseguido. Y en esa línea queremos seguir trabajando, porque hablamos de clientes potenciales que llegan desde muchos sitios distintos.

-El comercio de la ciudad suele decir que trabaja con casi medio millón de clientes, por el área de influencia compostelana.

-Totalmente, lo hemos visto durante estos meses. Hablamos de Ames y Teo, pero también de Barbanza, Vilagarcía y otros puntos de Pontevedra. Cada dos años, más o menos, se suele hacer un estudio de mercado y otro de clientes, y con los códigos postales de algunos tiques vemos que nos llega gente de forma recurrente desde distintos sitios y echando cuentas nos sale ese medio millón, que es algo que tenemos muy presente. Lo que nos interesa es tener una vinculación con nuestro entorno y fortalecer ese compromiso. Somos parte del tejido social y económico de Santiago y queremos hacer ciudad, pero también entorno.

-El momento, desde luego, no es fácil debido a todas las limitaciones que hay por el covid.

-Es una situación global y vivimos una crisis sin precedentes. A nivel sectorial ha habido un impacto y muchos de los cambios en hábitos de consumo que veníamos observando se han acelerado por la pandemia. Creo que nos hemos adaptado bastante rápido y algunos de esos cambios se enmarcarán en esta situación, pero otros llegan para quedarse.

-Por ejemplo, ¿las compras a través de Internet?

-Sin poder salir de casa está claro que se han consolidado y probablemente se mantengan. Si hablamos de competencia, lo digital gana peso, pero los centros comerciales son ocio y socialización. Eso no lo vamos a perder. ¿Por qué la gente va al cine con la cantidad de plataformas que hay? El cine en sí no es solo ver una película, al igual que el centro comercial no es solo ir a hacer la compra. Cuando se levantan las restricciones vemos que esa necesidad de socializar a varios niveles sigue estando ahí.

-Como gerente, las dificultades que atraviesan los negocios de As Cancelas también le tocan de cerca. ¿Qué postura adoptan para resolver estos problemas?

-La gestión tiene que tener en su ADN ese punto de comerciante. Esa mentalidad nos facilita la búsqueda de soluciones, tanto para nuestros consumidores como para los propios establecimientos. Hay sectores que han recibido el impacto de la pandemia muy fuertemente, sobre todo el de la hostelería, y desde el centro comercial tratamos de apoyar su capacidad de adaptación. Intentamos darles herramientas necesarias para ello: desde las digitales hasta formaciones sobre nuevos hábitos de consumo y evolución del mercado.

-Algunos locales están viviendo una situación delicada, incluso con impagos y riesgos de desahucio según el caso.

-Sabemos que la situación es de fuerza mayor y así lo entendemos. Ha habido un acompañamiento y un apoyo por nuestra parte, también a la hora de buscar soluciones porque somos conscientes de los efectos de la pandemia en sus negocios. Nuestra mano está tendida para buscar soluciones conjuntas porque eso nos beneficia a todos.

«No creo que haya competencia con el comercio local»

La carrera profesional de Javier Nicolás le ha llevado a trabajar en países como el Reino Unido, República Checa y Eslovaquia. Ahora llega a una ciudad que no se entiende sin su comercio local, que a veces mira a las grandes superficies comerciales con recelo. Apoyarse mutuamente para aprovechar las oportunidades del Xacobeo es su apuesta.

-La crisis derivada de la pandemia parece avivar la competencia con otros tipos de comercio como el de proximidad.

-Todas las vertientes tienen su público y tienen que convivir. El comercio de proximidad está muy vivo en la ciudad y no creo que haya competencia entre nosotros. Al final de lo que se trata es de aportar ideas y sacar beneficios para el comercio en mayúsculas, sea cual sea su canal. Y en nuestro compromiso con la ciudad también hay un compromiso con el resto de agentes.

-Su nombramiento llega con el año santo en Santiago. ¿Qué va a suponer a nivel de ventas?

-El Xacobeo es una gran oportunidad para Santiago y también una gran oportunidad para el comercio. Queremos ser un actor activo y colaborador, tanto a nivel institucional como con el comercio local, como ya he dicho. Santiago será un foco de interés turístico y se convertirá en una zona de afluencia. Confiamos en que este año sea una palanca importante en la recuperación, aunque estamos pendientes de la evolución de la pandemia para lanzar acciones concretas, que seguramente lancemos para el segundo semestre.

-De ser así, cuantos más visitantes lleguen, más importante serán las medidas de seguridad. ¿Cómo ha sido toda esa adaptación hasta la fecha?

-Hemos hecho una inversión importante para crear espacios seguros y de confianza: ahí están las tecnologías de control de aforos, que se pueden consultar a través del móvil antes de venir, pero también un refuerzo de nuestros servicios de limpieza e higiene, además de trabajar en mejorar la señalización y el control de accesos. Queremos que las compras sean seguras y en ese sentido tenemos el certificado Aenor y el de la Cámara de Comercio de Santiago, que avalan todo esto.

-¿Cree que el cliente siente esas medidas de prevención?

-La respuesta está siendo positiva y del mes de febrero a marzo hemos recuperado cierta normalidad. Entendemos que eso es señal de que la gente que viene lo hace tranquila.

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