El carril bici de Santiago en Clara Campoamor continuará por Amor Ruibal y el Hórreo hasta volver a su origen
SANTIAGO
Será el primer itinerario que se cree en la ciudad, que ahora mismo apenas tiene cuatro tramos inconexos para bicicletas
19 feb 2022 . Actualizado a las 21:42 h.Santiago no es una ciudad preparada para la bicicleta y, aunque su orografía y el clima no parecen un aliciente, tampoco son un impedimento para esa parte de la población comprometida con hacer de ese su medio de transporte habitual. Pero, de momento, no les queda otra que moverse compartiendo el asfalto disponible para el tráfico rodado. Porque, en Compostela, no se ha desarrollado un auténtico plan de movilidad en bicicleta. En los últimos catorce años apenas se han implantado tres kilómetros de carriles específicos para el uso de la bicicleta. Y no continuados.
Las calles Berlín y Londres, en Fontiñas, estrenaron los primeros en el 2008. Fueron 800 metros. El siguiente no llegaría hasta el año pasado, con la reforma de Clara Campoamor, que aportó en torno a otros 800 metros en una sola plataforma bidireccional. Y el cuarto se abrió hace escasos meses, con la reforma de la avenida de Asturias, que transformó los arcenes en carriles bici, lo que ha puesto al servicio de la bicicleta otros 1.330 metros, que serían el doble, como en el caso de Fontiñas, si se tiene en cuenta que ahí los carriles son independientes para cada sentido de la marcha. Pero, en cualquier caso, en el cómputo general de la ciudad el efecto seguiría siendo el mismo, la carencia de espacio específico para quien opta por un medio alternativo limpio para desplazarse por el casco urbano. Porque, además, el poco espacio que hay es inconexo.
La desconexión de esas cuatro iniciativas evidencia una clara falta de planificación con una visión global. Los carriles existentes surgieron de propuestas aisladas aprovechando la disponibilidad de espacio, con mayor o menor holgura. El programa comunitario Edusi brindará sin embargo este año la posibilidad de definir un itinerario de algo más de dos kilómetros en torno a la intermodal, aprovechando el carril que se implantó con la reforma de Clara Campoamor.
Varios puntos delicados
La propuesta no está totalmente cerrada, porque Madrid ha de autorizar todavía el proyecto, aunque no se esperan problemas. Habrá unos 350.000 euros disponibles para la redacción del proyecto, dirección y ejecución, suficiente, se estima, para dar continuidad al carril de Clara Campoamor por Amor Ruibal y el Hórreo. La reforma actual de esta calle ya plantea su implantación en el tramo en obras, con lo que habría que habilitar el del tramo anterior, para continuar hacia la avenida de Lugo hasta enlazar de nuevo con Clara Campoamor.
Los puntos más delicados de ese circuito aparte de las rotondas, donde no habría carril específico —aunque podría mejorarse su seguridad con pintura sobre el pavimento o señales—, son el tramo de aproximación a la glorieta de Galuresa y el carril que sale de la del Hórreo para conectar con la avenida de Lugo.
En el primer caso, la especialización de un espacio para las bicis dejaría con un solo carril la incorporación de Amor Ruibal a la rotonda. En el segundo, la boca del túnel del Hórreo no deja opciones para ampliar el carril de la avenida de Lugo, con lo que lo más probable es que en ambos puntos las bicicletas tengan que compartir plataforma con los vehículos. En ese caso, la señalización horizontal dejaría muy clara la presencia y preferencia de paso de los velocípedos.
La intención del departamento de Obras sería poder incorporar también Romero Donallo, para conectar el campus, aunque con ese presupuesto no parece viable. Deberá esperar a mejor ocasión, si llega el caso. En el centro de la ciudad, donde el ancho de las calles no permite pensar en carriles bici, el gobierno local ha optado por rebajar la velocidad, incluso antes de que lo hiciese la última normativa de Tráfico, para facilitar la convivencia de los vehículos a motor y a pedal. Compostela Aberta ya había iniciado también ese calmado del tráfico rodado limitando velocidades. Y había pintando pasos para las bicicletas.
El PP pide sendas peatonales y para bicicletas
El PP demanda al gobierno local la elaboración de un plan municipal de sendas peatonales y ciclables con el fin de conformar una red de itinerarios para comunicar los principales centros de atracción de la movilidad en la ciudad. Así lo expone en la moción que defenderá en el pleno de este mes y en la que pide que ese plan incluya las actuaciones en ejecución o previstas por otras administraciones.