La ciudad recupera en este puente festivo los picos de más afluencia turística de la campaña de verano con miles de visitantes que llenan la planta hotelera
13 oct 2023 . Actualizado a las 10:23 h.Desde primera hora de la mañana de este jueves numerosos turistas aguardaban en los puntos de encuentro para comenzar sus periplos guiados por el casco histórico. Natalia, con su paraguas blanco de Galicia Experience, contaba de manera amena la historia de la Catedral de Santiago, mientras 70 personas descansaban en las escaleras de A Quintana. Aún no eran las 11 de la mañana y la visita ya estaba a punto de terminar, después de recorrer las zonas más céntricas.
«Será un no parar», apuntaba Natalia. La guía reconocía que este Puente del Pilar llega para ellos «cargado de trabajo». Los turistas que participan en las visitas organizadas en las primeras y últimas horas del día «suelen quedarse a dormir en Santiago», explicaba otra guía, mientras su compañera puntualizaba que en las programadas a mediodía y a primera hora de la tarde «hay más gente que está fuera de Santiago, viene a la visita y se va».
La procedencia de los participantes en visitas guiadas y de los que aguardaban ayer su turno para ver el sepulcro es dispar. Entre ellos, Manuel Saavedra, procedente de Huelva y que visita Santiago por segunda vez, decía que «lo mejor es el fresquito. Vine en julio el año pasado, y mucho mejor ahora». Rosa, de la localidad madrileña de Villa del Prado, visita al Apóstol «desde hace 20 años, una vez al año. Este no pudimos venir por la fiesta, y venimos ahora. Nos gusta cumplir la tradición», señalaba. Para Carlos, de Madrid, y su grupo de amigos, tampoco es la primera vez en Santiago, aunque solo tenían previsto pasar unas horas en la ciudad: «Por la tarde nos vamos para A Coruña, y mañana [por hoy] a las Rías Baixas». Lucía, Mario y José Antonio, de Alicante, hicieron el Camino Francés desde Sarria, y este viernes tienen previsto regresar a casa. «Se respira de maravilla, dormimos con manta y cenamos de gloria. Qué más se puede pedir», sentencia Mario.
Las calles fueron un ir y venir de personas durante toda la mañana del jueves. Ramón Nóvoa, presidente de la nueva asociación de comerciantes y hosteleros A Porta Norte Compostela, apuntaba que «hay menos gente, pero gastan más que en agosto. Si el tique medio de agosto es de 3 euros, ahora puede ser de 60».
Las colas para acceder a la Catedral y a la zona del sepulcro fueron escasas hasta mediodía, cuando empezó a concentrarse más gente. Entre los visitantes, además de personas procedentes mayoritariamente de Andalucía, Madrid y Cataluña, también hay turistas de diversos países europeos y asiáticos. El ambiente en las calles comenzó a animarse a partir de las 13.00, porque hasta entonces los movimientos eran fundamentalmente de excursionistas y participantes en visitas guiadas. En las cafeterías hubo mucho movimiento a primera hora para los desayunos. En los restaurantes del Franco y del entorno de la Praza de Abastos —cerrada ayer—, el lleno llegó con las comidas, y en las terrazas se prolongó la actividad todo el día.
En Hostelería Compostela se muestran optimistas con este puente del Pilar, con unos cálculos de ocupación que superan en dos puntos las previsiones iniciales del sector y alcanzarán el 92 % de media en la ciudad.