La AG-59 entre A Ramallosa y Pontevea está ejecutada al 12 % y se concluirá a finales del 2025

Los trabajos de construcción de la prolongación hasta Pontevea de la autovía autonómica AG-59 Santiago-A Ramallosa, que comenzaron a finales de octubre del año pasado, alcanzan un grado de ejecución del 12,3 %, con la previsión de que concluyan a finales del 2025. Ayer se llevó a cabo una de las acciones más importantes del movimiento de tierras de toda la obra, con la voladura del desmonte 6, cerca de la localidad de Olveira, en Teo, municipio por el que discurrirá todo el nuevo trazado, de 3,5 kilómetros de longitud y con un coste que supera los 33 millones de euros.

En esta obra se están realizando una media de cuatro voladuras mensuales y hasta ahora se han realizado en dos desmontes, los identificados como 4 y 6. Este último se ubica en torno al punto kilométrico 102+750 de la obra de la AG-59. Las voladuras son imprescindibles porque los materiales para excavar son de tipo rocoso, cuya dureza impide que se pueda llevar a cabo por medios mecánicos convencionales. La voladura realizada ayer abarcaba un volumen de material de 4.500 metros cúbicos, por lo que se emplearon unos mil kilos de explosivos en un único disparo, para lo que se efectuaron cien barrenos de cinco metros de largo como media, formando una malla de 33 metros. El presupuesto de ejecución material de esta voladura fue de 39.015 euros.

Con motivo de esta intervención, visitaron la obra la conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas de la Xunta de Galicia, María Martínez Allegue, y el conselleiro de Cultura, anterior alcalde de A Estrada, José López Campos, junto a su sucesor al frente del Concello estradense, Gonzalo Louzao Dono, y la alcaldesa de Teo, Lucía Calvo de la Uz.

Para realizar la voladura se cumplió estrictamente el protocolo que rige en la zona. Ya que el trazado del futuro tramo de la autovía afecta a pistas y caminos públicos, el director facultativo de la obra se aseguró de que todos los accesos en el perímetro de seguridad estuvieran cortados y bajo vigilancia, y con una correcta señalización antes de ejecutar los disparos.

Asimismo, según informó el Concello de Teo, el mismo técnico y el artillero realizaron un examen del frente para asegurarse de que la voladura se realizaba correctamente y que no quedaran barrenos fallidos. El protocolo también incluía el empleo de protecciones adicionales sobre la propia voladura y los bienes a proteger, así como la restitución de la circulación cuando ya no había riesgo.

El siguiente tramo, cuatro kilómetros hasta O Rollo

El nuevo tramo entre A Ramallosa y Pontevea contará con dos enlaces que permitirán realizar los cuatro movimientos, tanto hacia el norte (en dirección a Santiago de Compostela) como hacia el sur (A Estrada). Uno de ellos será resultado de la reforma del existente en A Ramallosa, y el otro, sobre la carretera AC-241, en Pontevea, de nueva construcción. Al tiempo que se ejecuta este tramo, la Xunta está trabajando en el proyecto constructivo de la segunda fase de la autovía, un tramo de cuatro kilómetros de longitud entre Pontevea y O Rollo, ya en el municipio de A Estrada. Este nuevo proyecto supondrá una inversión de 30,6 millones. Una vez que entre en servicio toda la prolongación de la AG-59 hasta A Estrada, los tiempos de viaje entre Santiago y la localidad pontevedresa se reducirán a diez minutos.

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