Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

Inés de Lis, integrante de Faneka: «A mis compañeras les encantó la canción que hice en gallego»

La Voz

SANTIAGO

c

La banda, que actúa hoy en el Atardecer no Gaiás, mezcla sonidos del folklore con el rock

08 ago 2024 . Actualizado a las 04:55 h.

21 horas • Cidade da Cultura • Gratis • La última visita a Galicia de la banda Faneka es reciente ya que acaba de estar en el festival Ribeira Sacra y en Ferrol, pero en Santiago no toca desde antes de la pandemia. Hoy el grupo formado por Inés de Lis —con familia gallega—, Bruna González, Anika Sobrino y Alán Denís llegará al Gaiás con su último disco, «Naranjas al mar», en donde hay canciones en castellano, inglés, catalán y gallego. «Nunca he vivido en Galicia, pero aún así cada vez que voy a Galicia es una sensación especial», afirma Inés.

—Mezclan el folklore, esos sonidos de la tradición, con el rock progresivo. ¿Por qué esa mirada a la raíz para generar nuevas músicas actuales?

—Creo que hay una necesidad de conexión con algo propio después de un proceso muy grande de globalización. Dentro de la música esta especie de «revival» del folklore puede tener que ver con eso, con una generación más joven de personas como muy abiertas, pero con una necesidad de conexión y de arraigo.

—En este disco tienen canciones en cuatro idiomas. ¿Cómo surge toda esa mezcla?

—El inglés siempre lo hemos tenido, a mí siempre me ha gustado; el castellano es idioma materno; el catalán nos viene por Bruna, la chelista —que no puede acompañarnos en este concierto—; y el gallego lo he introducido yo. En un viaje a Galicia me puse a jugar con unos versos populares que había escuchado a un grupo de pandeireteiras, y al final me salió la canción. La terminé con ayuda de amigas galegas, que me dieron el visto bueno. Esa canción es un homenaje a mi madre y a mi abuela que son de ahí.

—¿Fue difícil convencer a sus compañeras de cantar la canción en gallego?

—No, al revés, fue fácil. Al final tenemos bastante apertura. Anika y yo somos madrileñas y, por eso, como que no tenemos un folklore. Quizás por ello me voy a la tierra de mi madre, a la tierra de mi abuela, a buscarlo. La canción les encantó y se la aprendieron.

—En ese «Lalalá» está presente ese «Pousa, pousa, e non me toques naquela cousa».

—Sí, eso se canta en mi familia de toda la vida. Son muy musicales y siempre en las reuniones familiares caían unas cuantas canciones populares. Llevo toda la vida oyéndolo y cantándolo, por eso lo metí en la canción.

—Más allá del «Lalalá», ¿se fijan mucho en el folklore gallego? También influye mucho el iberoamericano en su música.

—Esa canción no suena a folklore gallego excepto el final, pero en discos anteriores teníamos muchas sonoridades que llevan a la música celta, principalmente la irlandesa. Del folklore latinoamericano sí que hay una proporción grande. Tenemos el charango, un instrumento andino, en varios temas.

—En la canción en gallego dicen: «Teño todo canto quero ao alcance dos meus dedos». Ahí se refiere al paisaje, pero ¿cuántos sueños le quedan por cumplir a Faneka?

—Estamos muy contentas con lo que hemos conseguido. Siempre queremos superarnos, pero estamos muy a gusto con poder vivir de lo que hacemos y poder ofrecer música sentida, algo auténtico. Ese es el objetivo más grande.