Antón Permuy, entrenador del Compostela: «Si podemos marcar en un pase, no vamos a hacerlo en veinte»

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

El técnico santiagués insiste en la «agresividad con y si balón», en jugar «con mucho ritmo»

26 ago 2024 . Actualizado a las 20:37 h.

Antón Permuy (Santiago, 1990) cogió las riendas del Compos en el último tercio del pasado curso. Asumió una misión más peligrosa de lo que podría parecer, con el equipo a medio camino entre la promoción de ascenso y la de permanencia. Peleó por la quinta plaza hasta la última jornada y se quedó con la miel en los labios. Ahora afronta un nuevo desafío, empezando desde el principio, con un plantel muy reformado. Con solo 34 años, menos que alguno de sus discípulos.

—La pretemporada ya es historia. ¿Qué nota le pone?

—Es difícil. No es lo mismo la competición que los partidos amistosos, pero estamos muy contentos con la dinámica de los entrenamientos y la predisposición del equipo al trabajo.

—Ante el Fabril vi un Compos con nervio y colmillo. ¿Suscribe?

—Sí, creo que define bastante bien la idea del equipo, de jugar con mucho ritmo, de ser muy agresivos con y sin balón, competitivos, incómodos para los rivales, muy verticales.

—Se me anticipa a esta pregunta, la de la doble uve. ¿Verticalidad y velocidad siempre que se pueda?

—Va también con las características de los jugadores. Nuestra idea está clara. Si podemos marcar en un pase, no vamos a hacerlo en veinte. Habrá que dar los pases que hagan falta, pero lo antes posible.

—Pero se encontrarán rivales que acumularán jugadores por detrás del balón, cerca de la portería. Y ahí no se vio al equipo tan cómodo.

—Claro que nos vamos a encontrar bastantes partidos así. Y es cierto que en esta pretemporada no fue lo más habitual. Creo que tenemos nuestras armas, estamos preparados para todo. Evidentemente, puede ser más difícil que de la otra manera. Pero no creo que vaya a ser ese un contexto de máxima complicación.

—Lo que sí parece asentado es el modelo alrededor de tres centrales y dos carrileros, tres o cuatro centrocampistas y dos o un delanteros.

—Digamos que no es una foto fija, pero sí un punto de partida. A partir de ahí tendremos variantes, pero partiendo de inicio de esa colocación. No es algo inamovible ni van a ser siempre tres centrales de inicio.

—Con la llegada de Carlos Cinta cubren el riesgo que había, el de tener solo un nueve.

— Es un jugador diferente de Manu, va más al espacio, tiene capacidad para aguantar el balón, agresivo en presión. Es una alternativa diferente. Y también complementario. Y luego están todas las variantes del resto de jugadores de la primera plantilla.

—Las variantes del falso nueve, sobre todo con Gonzalo.

—Ante el Fabril hizo un buen partido en la segunda parte. Y digo en la segunda porque es cuando jugó ahí. Se complementó bien tanto con Óscar como con Hugo Matos el tiempo que estuvo, y luego con Fer. Giuliano puede ser otra opción. También Óscar. Tenemos varias posibilidades.

—Por cierto, los chavales de la cantera han aprovechado el tiempo.

—Tanto los que están en el primer equipo como los que tendrán licencia en la base. Nos dan calidad en los entrenamientos de cada día y compiten por el puesto. Nos da igual el DNI a la hora de decidir el once y los cambios. Los que mejor estén son los que van a entrar.

—Ya sé que a los entrenadores no les gusta individualizar. Pero permítame dos nombres: Diego, un todocampista, y De Prado, que era delantero y parece llevar toda la vida en el lateral.

—Teníamos muy claro que queríamos incorporar un perfil como el de Diego. Es el jugador que queríamos y pudimos traerlo. Santi ya acabó probando como lateral en el Sigüeiro y en Ourense le dieron continuidad ahí, alternándolo. Para nosotros, por sus capacidades, creo que es ideal, muy rápido, repetidor de esfuerzos, fuerte, agresivo. Estamos convencidos de que va a dar un gran nivel.

—¿Falta un pasador, un diez clásico que mueva las hilos?

—Fer Cano puede moverse entre líneas o en el centro del campo y es un gran pasador. También tenemos a Samu, Pablo Antas y Diego, que abarcan mucho campo pero también son buenos pasadores. Manu Barreiro puede asistir. Óscar, Gonzalo... Giuliano y Matos son más dribladores, pero también pueden enlazar. Estamos bien cubiertos.

«Creo que va a ser un grupo más duro que el año pasado»

La Segunda RFEF es una división muy traicionera. No suele haber grandes diferencias entre la promoción de ascenso y los puestos de la zona baja.

—¿Qué radiografía hace de la categoría?

—Creo que va a ser un grupo más duro que el del año pasado, con la llegada del Numancia y el ascenso del Salamanca. El Avilés ha hecho una inversión muy potente y estoy convencido de que esta vez va a estar arriba. Y el Pontevedra, que estuvo a punto de ascender y le da continuidad al proyecto. A partir de ahí, pienso que, como siempre, va a haber máxima igualdad. Es muy importante estar mentalmente fuertes, porque hay veces que parece que estás con los de arriba, tranquilo, y de repente pasas tres jornadas sin ganar y te ves abajo. Va a ser una liga muy bonita y estamos con muchas ganas.

—¿Algún jugador que le llame especialmente la atención?

—Hay varios, sobre todo en los equipos que antes le comentaba, los que están llamados a pelear por el ascenso.

—Pues al Compos le tocan dos de esos Miuras que cita para empezar. ¿Mejor cogerlos al principio?

—Realmente, hay que enfrentarse a todos los equipos en algún momento. Para nosotros van a ser dos test con equipos que sabemos que van a estar arriba y nos permitirán ver lo cerca o lejos que estamos de ellos.

—Usted tiene 34 años. Hay algún jugador de más edad en la plantilla. ¿Cómo se lleva esa tesitura?

—Lo veo como algo positivo. Con muchos coincidimos en edad. A otros los entrené en la base. Creo que tenemos el mismo momento vital, las mismas inquietudes, conocemos la misma música. Todo eso hace que nos podamos entender más fácilmente.

—No me diga que es reggaetonero.

—No. Alguno hay que le gusta, pero no van a tener para poner música en el vestuario.