Revés del gobierno de Santiago en el pleno al reasignar dos millones en proyectos sin negociarlo con los socialistas

El gobierno municipal (BNG-CA) no logró ayer los fondos que pretendía (1,8 millones) para completar las aportaciones municipales a proyectos cofinanciados con el programa Next Generation, una vinculación que implica su ejecución en plazos muy concretos para no perder las ayudas europeas. La habilitación de tales fondos, detrayéndolos de otros proyectos, fue uno de los asuntos que abordó el pleno extraordinario a propuesta del gobierno, que confiaba al menos en el apoyo de los socialistas, incluso sin haber negociado con ellos los proyectos que se verían afectados. Pero se encontró con su abstención y el rechazo consiguiente del pleno, al imponerse el voto negativo del PP.

Los socialistas abrieron la puerta a una solución negociada para un pleno posterior, pero ayer no estaban dispuestos a dejar pasar una iniciativa que no solo no tenía en cuenta la relevancia de sus votos para un gobierno en absoluta minoría, como es el de Goretti Sanmartín (8 concejales de 25), sino que además detraía esos fondos de proyectos que llevaban el sello del PSOE.

Su abstención fue suficiente para que la iniciativa decayese y para dejarle claro a Goretti Sanmartín que no puede trasladarle a ellos la «responsabilidade» de asegurar el visto bueno a cuestiones de tal calado cuando no las han tratado previamente. Marta Abal dio a entender incluso que el gobierno jugó a modo de «presión» con la correlación de fuerzas entre el ejecutivo (8 ediles), el PSOE (6) y el PP (11) para que los socialistas avalasen la iniciativa «polas consecuencias» que tendría no hacerlo. «Trouxeron isto sen o máis mínimo diálogo e transparencia coa oposición», les recriminó la socialista, antes de que su portavoz, Gonzalo Muíños, recordase al bipartito que «sen nós non lles dan as contas» y emplazase a la alcaldesa a no buscar culpables más allá del gobierno. Porque esta abstención, dijo, «é a súa responsabilidade».

«A veces a soberbia estalle a xogar malas pasadas», le espetó Muíños, quien indicó que su formación, el PSOE, es corresponsable «do que pasa aquí», sobre todo «porque o PP adoptou o non por sistema», pero eso «tampouco significa que nós teñamos que adoptar o si por sistema» para que las cuestiones que dependan del pleno salgan adelante.

El socialista apuntó que no solo están abiertos a negociar, sino que el gobierno lo sabe, pero que eso requiere voluntad de llegar a acuerdos por parte del ejecutivo, «e vostedes esta vez non tiveron esa vontade». «Conte con nós, pero non só para asentir e outorgar», dijo ante una alcaldesa cuyo nerviosismo fue evidente cuando vio que perdía la votación y cuyo llamamiento a la responsabilidad de la corporación cayó en saco roto.

Sanmartín pidió disculpas por no haber negociado el punto con los socialistas, disculpas públicas, dijo, porque en privado ya lo había hecho, expuso, y apeló a la urgencia del asunto y a la importancia de los proyectos que estaban a debate para justificar la falta de diálogo. En concreto, se trata de las reformas del pabellón de Vite, la del complejo deportivo de Santa Isabel, la urbanización exterior de la futura plataforma de reparto de mercancías para el casco histórico y la rehabilitación para visitas del pazo de Raxoi, todos vinculados a los fondos Next Generation.

Según el gobierno, los fondos municipales para completar su aportación (ya sea por el incremento de precios o modificados en los proyectos) se detraen de otros proyectos que ya no se ejecutarán este año, pero los socialistas apuntan que, en buena medida, los afectados son iniciativas del PSOE que venían del anterior mandato. «Quixeron só quitar créditos dos nosos proxectos e poñelos noutros coa escusa de que non lles dá tempo a executalos», dijo Muíños, quien apuntó que hay proyectos nacionalistas que tampoco da tiempo a abordar este año, «pero aí non tocan nada». La alcaldesa precisó que los cuatro vinculados a los fondos comunitarios vienen del mandato anterior.

Los populares justificaron su voto negativo en la larga lista de proyectos que se verían afectados por la detracción de esos fondos, sobre todo en el área deportiva, que cedería 300.000 euros, en lo que hizo especial hincapié José Ramón de la Fuente, por las muchas necesidades que observa en esa área. En ese listado, que dijo que revelaría él, ya que no lo hizo el concejal de Facenda, hay gastos en aceras, reparación de muros (sobre lo que también llamó la atención el PSOE), centros socioculturales, humanización de calles urbanas y en instalaciones deportivas, entre otras.

El gobierno culpa al PP de lo ocurrido por oponerse y a los socialistas, por facilitar su posición

Sin entrar en ninguna consideración sobre la iniciativa de llevar al pleno esos cuatro proyectos sin negociarlos siquiera con el PSOE, el gobierno descargó ayer cualquier responsabilidad en el PP. «O goberno denuncia a irresponsabilidade do PP ao opoñerse a proxectos importantes para a veciñanza», decía el ejecutivo de Sanmartín en una nota pública tras el pleno y en la que hacía copartícipe al PSOE, al «facilitar» con su abstención «a posición dos populares». El bipartito recuerda en dicha nota que los proyectos para los que pedía la suplementación de crédito proceden del anterior mandato y destaca que están sujetos a la justificación de fondos europeos Next Generation, lo que supone que el rechazo de la propuesta que ayer llevó a pleno «pode ter graves consecuencias non só para os propios proxectos, senón tamén para as arcas municipais». Y reclama a ambas formaciones «responsabilidade cos recursos públicos municipais».

La alcaldesa ya había expuesto en el pleno que si no se cumplen los plazos podía haber problemas para el Concello (la no ejecución y la devolución de fondos) y pedía «responsabilidade» a la oposición». Y admitía también que no había habido el diálogo que reclama el PSOE. «É certo que a urxencia dalgúns» de esos proyectos «e as dificultades para dicir a que fondos renuncias fixeron que non se acabara falando de maneira clara», pero indicó que algunos de los proyectos de los que se sacarían esas partidas ya están concluidos «e outros poderán incorporarse cando cheguen os orzamentos do 2025». También asumió en la sesión que si no se aprobaba la propuesta, «unha parte importante da responsabilidade será do goberno, pero tamén da oposición que lle ten que dar visto e prace».

La factura de Sogama se eleva a 3,1 millones este año

Lo que sí prosperó, en este caso con la abstención del PP y el respaldo del PSOE, fue la Conta Xeral del Ayuntamiento del año 2023, aunque los socialistas se quedaron sin las explicaciones que demandaron por segunda vez —ya lo habían hecho en la comisión de Facenda— por la pérdida de la subvención de 260.000 euros del Consorcio de Santiago para los Fogos do Apóstolo al no haber justificado el Concello el gasto a tiempo. Entre los números de los que dio cuenta el concejal de Facenda, Manuel César (BNG), y el propio análisis de la oposición sobre la gestión del bipartito, el gobierno asumió que la ejecución de la inversión ha sido baja, como cuestionaron desde las bancadas contrarias, pero también deslizó que se avanza en la reducción del período medio de pago a proveedores. El dato de agosto superaba los cien días y los 11 millones adeudados y en octubre estuvo en 65 días y 9,5 millones. Aun así, el plazo más que duplica el legal. Y esos retrasos «seguen danando a autónomos e empresas», dijo la popular Rosario Ferreiro, mientras que la socialista Marta Abal reclamaba que se avance de forma más decidida en la organización administrativa del Concello. César refirió que se está haciendo, pero que estas cosas precisan «esforzo e tempo». Así lo entiende también la alcaldesa, que reconoció que existen «eivas» en la gestión, pero que vienen de problemas estructurales de «hai moito tempo», dijo, de varios mandatos atrás.

La corporación también decidió, en un pleno de contenido exclusivamente económico, habilitar un crédito suplementario de 901.884 euros para hacer frente al gasto del tratamiento de los residuos sólidos urbanos por parte de Sogama de octubre a diciembre de este año. El total del año suma 3,1 millones, tras la subida del canon, sobre la que giró el debate con los posicionamientos ya conocidos de todas las formaciones de la corporación.

El PP se abstuvo también en este caso, como en el último punto, el que decidió la devolución al Gobierno central de 236.393 euros y el pago de 45.297 en intereses por el frustrado proyecto del Smartiago vinculado con la recogida de residuos. Concertado por el PP en su mandato, el Smartiago se desarrolló en el de Bugallo con un nivel de ejecución (el 82,5 %) que, sin ser total, Abal defendió como muy aceptable para su complejidad y los medios del Concello. Según César, el ministerio reclamaba 1,3 millones, pero sus alegaciones lo dejaron en esos 236.000 euros.

 

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