El movimiento vecinal de Santiago insiste en desarticular el Banco do Pobre y en el refuerzo de la plantilla de la UMAD
SANTIAGO
Los presentes apuntaron que si solo se ataca el narcotráfico, lo que ocurrirá es que los puntos de venta se desplacen por la ciudad
28 feb 2025 . Actualizado a las 08:17 h.La Casa das Asociacións de Cornes acogió ayer un nuevo ejemplo del renacimiento del movimiento vecinal. Lo hizo de la mano de una decena de asociaciones, que abordaron uno de los grandes temas que ha marcado el inicio del 2025: el consumo y tráfico de drogas. De nuevo en la primera línea política y social, entienden que exige medidas contundentes para atajar un problema que ha explotado, especialmente, en Santa Marta y A Choupana.
Los presentes debatieron sobre posibles soluciones, que creen que pasan, en primer lugar, por desarticular y atacar el tráfico de estupefacientes en el Banco do Pobre, que alguno de los presentes destacó que «atrae a toxicómanos de toda la comarca». No se quedaron ahí y consideraron que el segundo caballo de batalla pasa por reforzar la Unidad Municipal de Atención a Drogodependencias (UMAD), que denunciaron que cuenta con una plantilla insuficiente, destacando que actualmente cuenta con un único psiquiatra.
Los presentes apuntaron que si solo se ataca el narcotráfico, lo único que ocurrirá es que los puntos de venta de droga se vayan desplazando por la ciudad. Por ello, debatieron sobre un posible decálogo a seguir, que incluye la asistencia terapéutica a los drogodependientes; la coordinación de una respuesta con todas las administraciones implicadas; un análisis pormenorizado de los problemas que provoca la adicción; la puesta en marcha de campañas informativas sobre el riesgo para la salud; la iluminación de las zonas más desfavorecidas; y la puesta en marcha de un plan de integración social con talleres de empleo.