El trabajador de la gasolinera de A Rocha, situada en la salida de Santiago de la N-550 en dirección a Milladoiro (Ames), sigue en estado muy grave tras haber sido atropellado por un conductor que el pasado martes perdió el control de su vehículo al entrar en la estación de servicio y se empotró contra un surtidor.
Como consecuencia del impacto, J.C.V.S., de 48 años de edad, fue desplazado varios metros y sufrió traumatismos en todo el cuerpo. En el accidente también resultó herida leve una chica. Se trata de S.G.C., de 24 años, que era una de las cinco ocupantes del vehículo que provocó el accidente y no otra trabajadora de la estación de servicio como se creyó inicialmente.
Los empleados de la empresa que gestiona la gasolinera, Galuresa, mostraron ayer su confianza en la pronta recuperación de su compañero.