La factura anual de electricidad y combustibles ronda los 134.000 euros
15 ago 2018 . Actualizado a las 05:10 h.La factura energética trae de cabeza a muchos hogares, pero también a las administraciones públicas, que destinan a este capítulo sustanciosas partidas cuyo control es una tarea que no resulta fácil. La reducción de este gasto es una prioridad para los concellos, que disponen de distintas líneas externas de ayuda para mejorar su eficiencia energética.
En el caso de Ames, el Concello ha encargado una auditoría para saber cuánto paga por la luz y el combustible en dieciocho edificios e instalaciones de su propiedad. La cantidad resultante, que corresponde a una anualidad, roza los 134.000 euros. La mayor parte de este dinero, con más de 95.000 euros, se lo lleva la factura de la electricidad, mientras que los más de 38.000 euros restantes se van en pagar el gas natural y otro tipo de combustibles, especialmente el gasoil.
Estas cifras, desveladas ayer por el Concello, constan en una auditoría encargada por el Ayuntamiento para conocer el origen de estos gastos para reducirlos. El ahorro económico, y con él la rebaja de las emisiones contaminantes que genera la energía, es uno de los objetivos que la Administración local ha incluido en el programa Impulsa Ames, financiado con cargo a los fondos europeos del programa Edusi, que para este concello supondrán una aportación de cinco millones de euros en varias anualidades.
La auditoría, cuyo coste rondó los 15.000 euros, es el primer paso, ya que este documento está diseñado para su posible aplicación hasta el 2020.
Y según el estudio técnico, el Concello podría rebajar su factura energética en 40 %. Traducido a euros, supone un ahorro anual de más de 55.000 euros. Pero para conseguirlo es necesario acometer inversiones de distinto calado, y es en esta parte del proceso en la que el Concello de Ames debe decidir cuándo, cómo y también dónde, ya que la amortización de las mejoras más costosas puede necesitar hasta once años. El establecimiento de las prioridades dependerá, en parte, de las líneas de ayuda a las que se pueda acoger el Concello, que varían de año en año, tanto en el tipo de mejora subvencionable como en el plazo para tramitarla y las exigencias que marcan las administraciones que gestionan estos fondos. En función de estos programas, el Concello utilizará el dinero del plan Edusi en las mejoras que queden excluidas.
La conclusión que arroja la auditoría es apostar por luminarias led en los edificios en los que hay mucho consumo para que compense el elevado gasto. También optar por equipos fotovoltaicos, especialmente rentables en edificios de uso diurno, como las oficinas municipales y escuelas infantiles. Y sustituir calderas de gasoil, como las que hay en varias instalaciones deportivas es otra opción, al igual que bajar la potencia energética allí donde la que está contratada es excesiva.
95.433 €
Electricidad
Bombillas led y energía fotovoltaica reducirían el gasto.
28.267 €
Gas y gasoil
Eliminar las viejas calderas supondría un ahorro.
55.842 €
Ahorro final
La mayor rebaja, 36.843 euros, sería en electricidad.