Ocho artistas urbanas transformaron espacios públicos de Santiago, Ames y Teo en manifestaciones artísticas reivindicativas bajo la batuta de 7H Cooperativa Cultural
13 ene 2020 . Actualizado a las 22:19 h.Contra el hormigón, los espacios públicos deteriorados y las medianeras que chorrean humedad, el arte urbano es una buena vacuna. Y contra el feísmo machista, surge el arte urbano feminista. La comarca de Compostela fue un claro ejemplo de todo esto durante el mes de diciembre en el que Santiago, Ames y Teo engrosaron su patrimonio artístico con la obra de creadoras de todo el mundo que participaron en la primera edición del Delas Fest, el Festival Feminista Internacional de Arte Urbana e Contextual.
El festival, heredero del proyecto Elas tamén pintan, combinó talleres en Santiago y trabajos al aire libre en O Milladoiro (Ames) y Luou (Teo). En el primer caso, la Casa do Matadoiro, un edificio denostado durante años, alberga un mural que toma como referencia el último himno internacional feminista, Un violador en tu camino, surgido en el taller de Vegan Bunnies. Esta actividad evidenció el carácter contextual del encuentro al convertirse también en una intervención artística en las calles en respuesta a los comentarios machistas del joven que interrumpió, precisamente, la versión compostelana de la performance chilena.
Y a su vez, la fotógrafa aragonesa Lorena Cosba, tras conocer el funcionamiento de la Casa do Matadoiro y acercarse al crisol asociativo compostelano, dejó como legado una obra deliberadamente efímera que permanece colgada en el edificio hasta que la entidades que lo utilizan decidan mantenerlo.
La extensión del festival más allá de Santiago se tradujo en dos proyectos de gran formato que han transformado espacios tan distintos como el entorno en el que convergen el pabellón municipal de deportes de O Milladoiro y la Casa da Cultura, en donde uno de los muros de la instalación deportiva fue el lienzo de cemento que Btoy (Andrea Michaelsson) transformó en un manifiesto contra la homofobia tomando como punto de partida una imagen de la activista trans catalana Verónika Arauzo. En el proceso creativo de la obra, cargada de colores de estética pop-art, Btoy se reunió con coro amiense Son Elas, que la guiaron para acercarse a la realidad poliédrica de Ames.
Un proceso similar fue el que transformó el túnel de la carretera Luou-Solláns, con el legado que dejó el Dúo Amazonas, formado por Lina Castellanos y Natalia Andreoli, que en su caso tuvieron como inspiración a las teenses Aurora y Manuela Liste Forján, cuya historia conocieron por la asociación cultural A Mámoa, de Luou. Con su obra reivindican oficios feminizados. Lo consiguieron con retratos de estilo realista de tres pandereteiras y una vendedora de leche conectadas por una frase que, en diferentes versiones, todo el mundo vinculado al rural escuchó más de una vez: «Espertade irmáns, que xa pasaron as leiteiras».
Precisamente 7H Cooperativa Cultural diseñó el primer Delas Fest como una forma de despertar por parte del campo del feminismo a través del arte urbano. Por eso, tal y como reconoce una de sus integrantes, Clara Rodríguez Cordeiro, esta iniciativa nace con afán de continuidad, pero con cambios importantes tras su primera edición. Que diciembre no es un buen mes para el arte callejero no se le escapa a nadie, pero la elección de las fechas estuvo motivada por el necesario acceso a la financiación del proyecto. «Montamos o festival en apenas dous meses», reconoce Cordeiro, que avanza que la fecha que está sobre el papel para la próxima edición será en torno al mes de junio.
También proyectan extender los talleres a otros concellos, que esta vez solo se impartieron en Santiago. Para entonces, es más que probable que Santiago y su entorno repitan como capital internacional del arte urbano feminista.