Los concellos de Ames y Trazo adaptan las playas fluviales para una temporada muy distinta
24 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.En plena cuenta atrás para que toda Galicia entre en la segunda fase del proceso de desescalada, la autorización de acceso a las zonas de baño también incluye los espacios fluviales, que deben adaptarse a la nueva realidad.
Sin tener muy claro lo que se podrá hacer y lo que no a partir de mañana, en los espacios de referencia de Santiago, las playas fluviales de Tapia (Ames) y Chaián (Trazo y Santiago), ya se están tomando las primeras medidas, que suelen acometerse siempre por estas fechas ante la inminencia del verano.
En Tapia (Ames), la brigada de Obras comenzó a trabajar hace dos semanas. La tarea de los primeros días se centró en el espacio habilitado como aparcamiento, en donde fue preciso allanar la superficie, afectada por los temporales de invierno.
La siguiente fase de los trabajos se centró en la piscina, que suele sufrir daños como consecuencia de las crecidas del río, sin que el invierno pasado resultase una excepción. Limpiar con agua a presión los molinos del lugar y los caminos, además de eliminar hierbas invasoras, fue otra de las tareas del personal municipal. A la puesta a punto habitual de todos los años en esta ocasión el Concello tiene mucho trabajo añadido.
Dada la afluencia de visitantes de esta playa fluvial, el Concello de Ames debe contratar socorristas, que este año tendrán que cumplir medidas de seguridad extras para protegerse del covid-19. Mantener una distancia mínima de dos metros, reforzar la higiene de manos y respiratoria, usar de equipos de protección y extremar la limpieza con productos higienizantes serán las nuevas normas para el personal que trabaje este verano. El Concello, por su parte, también deberá tratar el agua de la piscina siguiendo los criterios de Sanidad.?
Blas García, edil de Obras, pide al vecindario «comprensión e respecto polas normas de uso para unha situación tan excepcional como a que nos atopamos», a la vez que lamenta los problemas del pasado fin de semana en Tapia, ya que la Policía Local tuvo que acudir a la playa fluvial ante la masiva afluencia de personas a la zona, pese a no estar autorizada.
A la par que Ames, Trazo ya trabaja para que el área recreativa de Chaián se convierta en un espacio sanitario seguro y adecuado para el disfrute. Desde hace una semana, la cafetería del entorno fluvial está abierta al disponer de una amplia terraza en plena carballeira junto al Tambre. El establecimiento cuenta con todo el material higiénico y de desinfección contra el covid-19, por lo que este lugar, que abre al mediodía (el horario habitual es a las once) y no cierra hasta la noche, está muy concurrido.
La regidora de Trazo, Fina Suárez, ha confirmado que mañana lunes comenzarán los trabajos de limpieza y desbroce de la maleza como primer paso para el acondicionamiento de este entorno, para el que anuncia todas las medidas que sean necesarias para garantizar la seguridad sanitaria.
El área recreativa de Furelos espera su puesta a punto para el verano
Aunque más alejada de la capital gallega, otra de las áreas recreativas de referencia en la zona se encuentra en Melide. Es la que riega el río Furelos a su paso por la parroquia del mismo nombre y en el límite con el vecino municipio de Toques. En ella, el bipartito melidense tiene previsto actuar próximamente para realizar la puesta a punto habitual por estas fechas para que la playa fluvial esté lista para disfrute de vecinos y visitantes desde el comienzo del verano.
El acondicionamiento de la extensa zona verde, dotada de merendero, de la iluminación, así como del solario, carpintería y mobiliario en madera, y la limpieza y llenado de las piscinas son algunos de los trabajos pendientes, a los que se sumarán las medidas de seguridad que recomienden las autoridades sanitarias para prevenir el contagio del covid-19 entre los usuarios.