Xosé Tunhas lleva 15 años fabricando instrumentos de percusión, hace trabajos personalizados y muchos artistas han confiado en él
05 ago 2020 . Actualizado a las 08:29 h.Tendría unos 22 años cuando se le ocurrió desmontar un tambor «por ver como estaba feito e saber tamén como coidalo». Xosé Tunhas tocaba entonces este instrumento en la banda de gaitas Os Castros de Ames, concello al que pertenece y en el que acabó estableciendo su propio taller de artesanía. Lo que empezó como un pasatiempo terminó convirtiéndose en su medio de vida. Desde O Pontanxil (un núcleo de poco más de 60 habitantes, en la parroquia de Trasmonte) le llegan encargos de medio mundo. «Agora estou facendo unha pandeireta para Xapón. Non é a primeira que mando para alá. É para unha rapaza xaponesa que canta e toca. Tamén teño enviado instrumentos a Suíza, Gales, Estados Unidos, Sudamérica...». ¿Algún lugar que no haya colonizado aún? «Para Australia non fixen aínda nada, pero todo se andará», responde con una sonrisa. Cuenta que empezó a tocar con 17 años. «Sempre percusión», incide, y lo primero que fabricó fue una pandereta, la cual conserva todavía. «Daquela parecíame que me saíra moi ben. Agora, con un pouco de perspectiva, véxoa como o traballo dun principiante, que é o que era», comenta. El conocimiento que tiene como músico (es baterista de Caxade), junto con el mimo y empeño que pone en cada pieza, han hecho que muchos artistas confiaran en él.
«Para min todos os encargos son importantes, tanto me ten que sexa para Xabier Díaz como para calquera alumno dunha escola, fágoos co mesmo interese. É certo que sempre da gusto que alguén recoñecido confíe en ti, dáche certo prestixio e é gratificante», reconoce. La lista es larga, pero «Felisa Segade, de Leilía, foi unha das primeiriñas ás que lle fixen un tambor». Xosé se formó en el oficio de forma autodidacta, dejándose guiar por su propio oído y por los consejos de sus clientes. Lleva ya 15 años como autónomo y en los últimos tiempos se ha aliado con las nuevas tecnologías para hacer instrumentos personalizados poco convencionales.
Usa una máquina láser para grabar frases, logos o dibujos. Y, en colaboración con la empresa del investigador y técnico de sonido Tomás Ageitos (Landra), elabora con sus membranas sintéticas —sustituyen a la piel tradicional y no varían de sonido en función de los cambios de temperatura— desde impactantes panderetas totalmente negras como la que hizo para María Xosé Silvar (Sés) y hasta con un dibujo de un unicornio en el parche o un retrato realista de la abuela de un cliente.
A diferencia de lo que ocurre con otros oficios en peligro de extinción, asegura que en la fabricación de instrumentos sucede todo lo contrario: «Cada vez hai máis artesáns, afortunadamente, porque a música tradicional está moi viva e se hai xente tocando haberá outros coma min construíndo, vendendo e reparando».
Trucos para perregrinar
Hasta en tres ocasiones la actriz y presentadora Sara Escudero ha perregrinado hasta Santiago con sus dos golden retriever (Nala y Zuri) por el Camino Francés. Por eso ha sido fichada por el Ministerio de Cultura como embajadora en la web del Consejo Jacobeo para dar algunos «consejines» sobre cómo hacer la ruta acompañado de una mascota y explicar la experiencia. Para ella, «lo importante del Camino es hacerlo con la compañía que quieres, a tu ritmo y sin pensar en otra cosa que no sea vivirlo, cada paso», destaca la avileña en sus redes sociales.
Tras el ADN «ullán»
Salidas de campo, actividades de interpretación, talleres sobre cultura, acampadas, acciones de sensibilización, investigación y divulgación... Todo ello sirvió en las últimas dos semanas para acercar a los jóvenes de la comarca da Ulla al territorio que los rodea y a los actores sociales que lo habitan. De este modo buscaba despertar la vinculación con su entorno ADN_Ulla, un proyecto de Iniciativa Xove subvencionado por la Dirección Xeral de Xuventude. Con Fátima Limia Rocha como responsable informal del grupo, 21 jóvenes de entre 13 y 25 años se han dedicado a seguir la huella del «carácter ullán» para divulgarla en el nuevo mundo de las redes sociales. El equipo comenzó el día 20 a recuperar la memoria a través del testimonio oral, como punto de partida para conocer la historia y carácter propio de la comarca. Tras conectar con ese «sentir», será divulgado ahora en un soporte familiar para las redes sociales.