Movilidad, demografía y vivienda, los deberes que marca la Agenda 2030

Emma Araújo SANTIAGO / LA VOZ

AMES

PACO RODRÍGUEZ

Los alcaldes de Ames, Santiago, A Coruña, A Estrada y Redondela analizaron en Bertamiráns las políticas de sostenibilidad con la participación del delegado del Gobierno, José Miñones, y el representante territorial de la Xunta, Gonzalo Trenor

22 dic 2022 . Actualizado a las 22:31 h.

La figura de la Agenda 2030 tiene su origen en el 2015, cuando Naciones Unidas aprobó este documento como una hoja de ruta para definir el futuro del planeta basado en la prosperidad de las personas con criterios sostenibles. Un año después, la Unión Europea fijó sus criterios en un documento propio. A partir de ese momento, los estados miembros diseñaron sus estrategias. España lo hizo en el 2019 y, siguiendo la escala descendente, las administraciones locales trabajan en sus propios marcos. No es un documento baladí, ya que es un programa vinculante para acceder a los fondos europeos, enfocados, precisamente a la búsqueda de una economía más humana y sostenible.

A Coruña aprobó su Axenda Urbana en septiembre, mientras Santiago y Ames están en pleno proceso de redacción. Compostela ya concluyó las primeras fases, y ahora está inmersa en la redacción de su Plan Estratéxico de Acción Local (PEAL), un proceso que contó con la colaboración de la USC y el Consello Económico e Social. Ames, por su parte, acaba de presentar su diagnóstico estratégico, por lo que su siguiente paso es continuar con el proceso participativo para tener su propio PEAL.

Analizar el papel de las ciudades intermedias, con censos de población entre 20.000 y 50.000 habitantes, y la importancia que juegan en su desarrollo sus Axendas Urbanas, fue el objetivo de la jornada técnica y política organizada por el Concello de Ames con la colaboración de La Voz de Galicia. En la jornada intervinieron, por este orden, el alcalde de Ames, Blas García; el delegado territorial de la Xunta, Gonzalo Trenor; la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey; el regidor de Santiago, José Sánchez Bugallo; una de las redactoras de la Axenda Urbana de Santiago y miembro del Foro Económico de Galicia, María Cadaval; la alcaldesa de Redondela, Digna Rivas; el regidor de A Estrada, José López Campos; y el delegado del Gobierno, José Miñones.

Las diferentes intervenciones evidenciaron los problemas y retos de todas las urbes, sin importar su censo. Conseguir una movilidad ágil y sostenible, asentar o incrementar población y solucionar los problemas de acceso a la vivienda son los grandes retos. Y una herramienta que los concellos tienen a mano son los fondos europeos, condicionados al diseño de las estrategias sostenibles que marca la Unión Europea.

Del proceso para contar con las agendas urbanas locales y del papel de la ciudadanía para marcar las pautas habló María Cadaval, que agradeció la implicación de la sociedad compostelana y dejó sobre la mesa el interrogante de qué hacer con los residuos urbanos.

Las directrices que exige la Agenda 2030 se están comenzando a aplicar, con proyectos que apuestan por un cambio de modelo que para ser eficaz debe transformar los espacios urbanos. Y en este campo, como en cualquier otro, hay realidades contrapuestas. A Coruña y Santiago son un claro ejemplo por una simple cuestión de espacio. La primera mide 37,8 kilómetros cuadrados, en los que viven 245.468 habitantes, y Compostela supera los 222 kilómetros para un censo de 97.858 personas. Por eso, según destacó Inés Rey en su diálogo con Sánchez Bugallo, la apuesta herculina de futuro pasa por recuperar los terrenos del puerto interior para un aprovechamiento urbano sostenible «e pensar en todos os barrios da cidade para dotalos de servizos fundamentais para desenvolverse igual que o resto». En cuanto al modelo económico, marca el camino la reciente concesión del proyecto estratégico de la Agencia Española de Supervisión de Inteligencia Artificial.

Santiago tiene el problema contrario, necesita más medios para gestionar una ciudad con 2.600 edificios catalogados por su valor patrimonial y debe mantener cinco millones de metros cuadrados verdes. Y en el ámbito económico, según expuso Bugallo, el reto es evitar la fuga de jóvenes que no acceden a vivienda. «Hai que conseguir que a formación que xera o sector da biomedicina se quede en Santiago e viva en Santiago», planteó.

La movilidad también las diferencia. La población coruñesa trabaja en concellos limítrofes y se desplaza a espacios naturales colindantes. Y Santiago recibe a más de diez mil personas al día de su área metropolitana más cercana. En cuanto a los espacios urbanos ya transformados, Rey resaltó que una vez reformulados el vecindario pide más metros para disfrute peatonal, pero sin excluir completamente al automóvil, mientras que Bugallo reconoció que se necesita tiempo para modificar los hábitos de la población.

Conseguir una movilidad que se ajuste a las necesidades de Ames también formó parte del debate, con el objetivo de tener mejores comunicaciones para el rural y con Santiago. Y humanizar O Milladoiro.

Lavandeira jr | EFE

El reequilibrio territorial, objetivo de los ayuntamientos

El punto de vista de las ciudades intermedias estuvo representado en la jornada por Ames, concello anfitrión, junto con Redondela y A Estrada. Blas García, regidor amiense, incidió en como el reparto demográfico lo condiciona todo en su municipio, con dos núcleos que por separado tienen más población que muchos ayuntamientos gallegos, ya que el censo de O Milladoiro supera las 13.000 personas y Bertamiráns ronda las 10.000, a lo que se añade un rural muy extenso que no se escapa de la fuga de población, algo que el Concello busca revertir con su Axenda Urbana. En este sentido, García resaltó el papel que pueden jugar los concellos para ayudar a «crear novas vías de aforro, como as comunidades enerxéticas», además de plantear políticas activas para un parque de viviendas asequibles para compra o alquiler, movilizando para ello el suelo que los ayuntamientos tienen en propiedad procedente del desarrollo de polígonos urbanísticos ya construidos o por edificar.

Digna Rivas, regidora de Redondela, municipio de 29.055 habitantes, ofreció el punto de vista de un concello urbano y costero, con graves problemas de concienciación ciudadana para conseguir espacios peatonales y de uso público con un modelo de transporte interno muy ligado al vehículo particular. Transformar la plaza de Ponteareas para hacerla accesible y paseable fue un punto de partida, con un proceso de escucha para el que la alcaldesa reclama que se tenga en cuenta a la población más joven para hacerla partícipe del territorio en el que vive y para que conozca paulatinamente cómo funcionan las instituciones que les gobiernan, ya que las generaciones que ahora están en las aulas serán adultas cuando se aplique Agenda 2030 al completo.

En su intervención, el regidor de A Estrada, José López Campos, incidió en que, si bien sobre el 70 % de la población vive en el 20 % del territorio, no hay que olvidar al resto de Galicia, la más rural y que también, quiso destacar, es la artífice de la Galicia actual. Gestionar un municipio con 51 parroquias y 470 núcleos de población supone «unha dificultade enorme para prestar servizos», reconoció, aun con la ventaja de la cercanía con Santiago. Este alcalde confirma las ventajas de haber conseguido fondos Edusi y da por hecho que los cambios de mentalidad que trajo la pandemia, con una demanda de espacios abiertos y más cercanía con la naturaleza, son una oportunidad para los concellos menos urbanos y con crecimiento vegetativo negativo, como es el caso de A Estrada.

José Miñones, delegado del Gobierno en Galicia, clausuró la jornada destacando el papel de los concellos para marcar y conseguir los objetivos de la Agenda 2030. «Eles son os que saben as necesidades que hai, e aí temos que estar», afirmó, ya que corresponde a la Administración central trasladar fondos económicos a proyectos viables. Como preludio, están aprobados proyectos piloto en nueve concellos gallegos, A Coruña y Santiago, entre ellos. Y en este sentido reconoció que los concellos que gestionan sus programas Edusi tienen mucho adelantado: «Temos que falar a música que fala Europa, e estes concellos xa a están a falar hai sete anos».

Gonzalo Trenor, encargado de abrir la jornada como representante de la Xunta, destacó el valor de la Agenda 2030 y los documentos urbanos. «É fundamental dedicar tempo e recursos a planificar as cidades porque despois vivimos durante décadas coas decisións que tomamos», señaló.