La romería de Santa Minia de Brión busca ser fiesta de interés de Galicia y avala su arraigo con 1.200 firmas

emma araújo SANTIAGO / LA VOZ

BRIÓN

Sandra Alonso

El Concello presentó por primera vez la solicitud de reconocimiento para esta cita, promovida por el vecindario

27 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Pocas romerías tienen la capacidad de reunir a decenas de miles de personas sin que una parte significativa de ellas acuda por motivos religiosos. La romería de Santa Minia, que Brión celebra cada 27 de septiembre, goza de esa capacidad aglutinadora y de reunión en un espacio, la capilla de la santa, que hace años se quedó pequeña por lo que las misas en honor a esta joven mártir procedente de Roma deben celebrarse en un espacio al aire libre diseñado para ese fin.

Por este motivo, y con las dudas sobre qué pasará con el grueso de la carballeira de Santa Minia después de que se detectase una expansiva plaga mortal en algunos de los árboles, el Concello de Brión ha decidido solicitar el reconocimiento de esta romería como Festa de Interese Turístico de Galicia.

En la tramitación del expediente se le ha pedido al Ayuntamiento de Brión que demuestre el arraigo de la romería. Y en apenas tres días, el plazo establecido para presentar alegaciones al rechazo inicial a la petición, el Concello reunió más de 1.200 firmas de vecinos de Brión cargados de recuerdos vinculados a la Santa Minia. La recogida se hizo en varios edificios municipales, como el consistorio, la Casa da Cultura, la biblioteca y el centro polivalente. También en parte de las cafeterías del municipio y bares de las distintas parroquias. El encendido del alumbrado navideño del día 13 fue uno de los momentos elegidos para conseguir más rúbricas, además de la cita dominical del baile de mayores y las competiciones deportivas del fin de semana.

Las firmas sirvieron para evidenciar el arraigo de la fiesta, mientras que para demostrar la singularidad de la misma se optó por incorporar informes de un historiador, del párroco de Santa Minia y el de un vecino que formaba parte de la organización antes de que el Ayuntamiento de Brión recogiese el testigo. También se incorporaron testimonios periodísticos y reportajes en medios de comunicación que constatan las peculiaridades de esta fiesta, además de una reseña de la publicación Brión en fotos en la que se recogen fotografías de la década de los años 50 del siglo pasado que demuestran como la población de distintas parroquias se desplazaba en grupo.

Una herencia del XIX

El historiador Clodio González, miembro de la Real Academia Galega y autor del libro Brión: historia, economía, cultura, arte, destaca en su informe que la veneración por Santa Minia comenzó a mediados del siglo XIX cuando llegan a Brión, procedentes de Cádiz, los restos de la santa, una mártir romana del siglo IV después de Cristo. Los traslada Luis Tubío, brionés de Lamiño que heredó la reliquia de la persona para la que trabajaba en la ciudad andaluza. En 1849, detalla la investigación de González, se autoriza la construcción del santuario, que recibe a la santa el 26 de septiembre de 1868, por lo que la fecha de su festividad se fija para el día siguiente.

José Luis Dorelle Iglesias, párroco de Brión, señala en su informe que «a piedade popular e espontánea dos visitantes atopa en torno ao sepulcro de Santa Minia un lugar privilexiado onde expresa dende hai mais de 175 anos un sentir e vivir que xa está acreditado por miles de visitantes cada ano». «Foi unha devoción e festividade que non naceu estritamente no seo da xerarquía eclesiástica, senón no sentir común dun grupo de fieis laicos brioneses que desde o século XIX foron donos do corpo-relicario da santa, tributáronlle culto e preocupáronse de fomentar e irradiar a súa devoción non sendo o templo de titularidade eclesiástica ata 1978», añade Dorelle.