La multa por ocupar la vía pública sin autorización es de 300 euros El Concello es ahora más estricto al aplicar la norma de retirar los recipientes losviernes
17 ene 2007 . Actualizado a las 06:00 h.?a norma que obliga a las empresas de contenedores de obras a retirar los recipientes de las zonas más céntricas del Ensanche y de todo el casco viejo no es nueva, pero hasta hace poco, según comentaron algunos titulares de las empresas consultados, el Ayuntamiento de Santiago venía avisando a los responsables de las firmas, que se evitaban así una multa de hasta 300 euros por no retirar el recipiente de la vía pública durante el fin de semana. El propietario de Contenedores Sapa dijo que ellos tienen seis o siete multas recurridas y aseguró que las demás empresas también tienen presentados recursos. No comparten los empresarios la opinión del Concello de que sean ellos los que tengan que pagar una multa, cuando el permiso para colocar el contenedor no es solicitado por ellos sino por los promotores de las obras. Durante la jornada de viernes las tres empresas de contenedores que operan en Santiago vienen retirando alrededor de una veintena de contenedores de la ciudad; la mayoría están en el casco histórico y su ámbito y también en las calles más céntricas del Ensanche. Pese a los inconvenientes de tener que retirar los contenedores antes de las diez de la mañana de todos los sábados del año, los empresarios consideran que lo peor son los problemas que genera la lentitud a la hora de conceder licencias. Desde Urbaser y Ponte Mantible comparten la crítica de Sapa, que propone seguir el modelo de Vigo o Coruña, donde hay un convenio con las empresas de contenedores, que agiliza los trámites. Los propietarios de estas empresas explicaron que el permiso para ocupar la vía pública es tramitado por el cliente, que piensa que una vez pagadas las tasas tiene ya el permiso, pero no es así. Hasta hace poco, las empresas que ponían los contenedores durante este tiempo de espera no solían ser multadas. En cambio, ahora la sanción llega con cierta diligencia. Los titulares de las empresas consideran que, en este caso, ellos no deberían ser los multados, ya que no tramitan el permiso. Un portavoz del sector comentó que muchos particulares prefieren deshacerse de los escombros de obras menores en cualquier monte antes que esperar varias semanas por los permisos para colocar un contenedor de obras. Las tres empresas que operan en Santiago disponen de alrededor de mil contenedores de obras repartidas por todo el municipio. Urbaser y Ponte Mantible son las que disponen de más recipientes y entre las dos rondan las ochocientas unidades.