Galipizza descarta reabrir a corto plazo en Compostela si no soluciona el problema de ruidos
SANTIAGO CIUDAD
El propietario ya despidió al personal y trasladará el material al restaurante de Vigo, que está en obras
18 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El restaurante Galipizza, ubicado en la avenida da Liberdade, en el barrio compostelano de Santa Marta, cerrará definitivamente si antes del martes no se modifica la resolución municipal que dictaminó este cierre por superar los niveles máximos de contaminación acústica nocturna que permite la ley (30 decibelios).
El propietario, José Manuel Vázquez, solicitó una medición alternativa para estudiar como rebajar los decibelios, pero afirma que los vecinos afectados no les permitieron acceder a las viviendas, por lo que da por hecho que no habrá ningún cambio de criterio antes del martes, fecha en la que expira el plazo de diez días como trámite de audiencia por el Concello de Santiago, que tenía abierto un expediente urbanístico a este local desde hace tiempo.
«Si no quieren que hagamos nuestras mediciones, será que algo tienen que ocultar», afirma el titular de la cadena hostelera, que entiende que ante el desacuerdo entre ambas partes la única vía que parece quedar abierta es la judicial.
El restaurante permanece cerrado desde hace más de una semana y las 25 personas que conformaban la plantilla ya no están trabajando, aunque Vázquez reitera que si se soluciona el problema recuperaría al personal para retomar la actividad.
El cierre del Galipizza de Santa Marta implicará el abandono de la marca de Santiago a corto plazo, ya que su propietario y gerente confirma que en estos momentos, con una obra sin terminar en Vigo, no puede asumir dos proyectos. Para compensar la inversión efectuada y rebajar costes en la sede viguesa trasladará todo el material del restaurante compostelano, en cuyas ventanas están colocados carteles que relacionan el cierre con «trabajos de acondicionamiento».
Vázquez confirma que buscó locales para su restaurante en As Cancelas, pero los disponibles no tienen la superficie que necesita para desarrollar su actividad. «Siempre fui partidario de la hostelería de calle, pero situaciones como esta nos obligan a optar por los centros comerciales, aunque no nos guste».
Con este cierre anunciado, la marca Galipizza se queda con los restaurantes de Oviedo, Culleredo, Ribadeo y Viveiro, a la espera de inaugurar en Vigo.
«Habla con Urbanismo», responde al otro lado del vídeo-portero del inmueble una de las personas afectadas por los niveles de ruido del Galipizza. Otros vecinos del mismo edificio afirman que los problemas de ruido afectan a dos de los tres portales y sobre todo en la primera planta, bajo la que está el restaurante.
Ninguno de los vecinos de la planta primera de este edificio que a primera hora de la tarde de ayer contestaron por el videoportero a las preguntas de La Voz quiso pronunciarse sobre el conflicto y los ruidos que denuncian.