Farmacia dice adiós a Eduardo Iribarnegaray Jado, un docente que dejó huella
SANTIAGO CIUDAD
El catedrático de la USC desarrolló su labor profesional en el departamento de Química Física Aplicada
27 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Una misa vespertina en la capilla del tanatorio municipal de Boisaca y un funeral por la tarde en la iglesia de San Francisco sirvieron ayer para dar el último adiós a Eduardo Iribarnegaray Jado, a sus 72 años, cumplidos en marzo. El catedrático ya jubilado de la Universidade de Santiago dejó huella en la Facultade de Farmacia, donde ingresó tras obtener el número uno en el cuerpo de profesores adjuntos numerarios en el año 1977.
El catedrático desarrolló su labor profesional en el departamento de Química Física Aplicada y sus alumnos recuerdan su lado más campechano como docente, así como una extensa lista de frases divertidas que dejó su paso por las aulas, donde impartió sabiduría y grandes dosis de realidad. La Universidade hizo público su hondo pesar por el fallecimiento del profesor.
Eduardo Iribarnegaray Jado estaba casado con May Velenzuela Cameáns y tenía tres hijos, Eduardo, Jacobo y Marta, y cinco nietos.