El santuario Vacaloura logra el terreno definitivo y seguro que buscaba para sus 250 animales

SANTIAGO CIUDAD

Inés Trillo y Mario Santiago esperan adecuar la finca de Arzúa y terminar la mudanza para mayo
17 nov 2020 . Actualizado a las 15:35 h.«¡Lo conseguimos!», exclamaba Inés Trillo emocionada, tras conocer este fin de semana que «el sueño por el que llevamos luchando más de 10 años se hará realidad». Ella y Mario Santiago, fundadores del santuario animal Vacaloura en Santiago, comunicaban a través de un vídeo en directo en Facebook a sus más de 24.000 seguidores la buena noticia. Gracias al apoyo popular, sorteos e iniciativas variopintas, conseguían en tiempo récord el dinero que faltaba para comprar un terreno definitivo y seguro donde realojar a los 250 animales rescatados. El último empujón llegaba poco antes de vencer el plazo límite. Necesitaban más de 10.000 «corazones», es decir, microdonaciones de 5 euros para alcanzar el objetivo de una campaña que arrancó el pasado invierno.

Así, pudieron evitar perder la fianza y mañana mismo tienen previsto formalizar la adquisición de la finca, en Arzúa. «La verdad es que no nos lo creemos. Esto es algo que solo se podía conseguir en equipo, si no fuera por todos vosotros. Nos emociona muchísimo haber creado esta gran familia, aunque sea virtual, que esperamos poder desvirtualizarla pronto», añadía Inés en el directo, en el que brindaron a la salud de sus «vacaloures, de los animales, que son los que ganan con todo esto, por todos los que no llegaron y por todos los que están por salvar». Con gran pesar, confesaba que en los últimos días y, a causa del mal estado de las instalaciones que tienen en régimen de alquiler en el municipio santiagués, «tuvimos alguna pérdida». Precisamente porque querían evitar este tipo de tragedias, veían imprescindible encontrar un nuevo hogar en el que no corrieran peligro y suyo, en el que las inversiones no fueran a fondo perdido. Su intención es poder adecuar la nueva finca y terminar la mudanza para mayo. «Hay que llevar las vayas para cercarla, arreglar el tejado de la casa, construir cuadras porque no hay para todos...», enumeraba Mario, recordando que en los meses de lluvia las obras no avanzan siempre al ritmo deseado. Ahora que se ha conseguido lo más difícil, recuerdan, queda trabajar para «hacer un paraíso y que sea perfecto». Para hacerlo, agradecen toda la ayuda que puedan recibir para el traslado, en las labores de construcción o cualquier propuesta de voluntariado. La cadena solidaria sigue en pie y es más fuerte que nunca.

Novela histórica
El escritor compostelano Rodrigo Costoya ya tiene en su haber el Premio Internacional de Novela Histórica Ciudad de Úbeda, dotado con 10.000 euros, un diploma acreditativo y la publicación por Ediciones Pàmies. El autor de El custodio de los libros, la obra ganadora, recogía el galardón tras un largo discurso en el que aseguró que «ver tu libro tanto en pequeñas librerías como en grandes superficies es un sueño, y de eso va mi novela, de sueños». Las tres obras finalistas fueron seleccionadas por una comisión lectora y, entre ellas, eligió el vencedor un jurado profesional formado por los escritores Jesús Maeso de la Torre, Salvador Compán, Pedro Santamaría, el periodista David Yagüe y el editor de Pàmies, Carlos Alonso.

Magosto «streaming»
Los Magostos no Gaiás eran, en estos últimos años, una de las citas más esperadas del otoño en Santiago. Un encuentro con la tradición y los sabores de siempre, en esta ocasión amenizado por Luar na Lubre, Sumrrá y Milladoiro. La célebre banda que se mantiene en pie tras 40 años cerró el sábado un evento reconvertido en streaming y con un aforo híper reducido, de acuerdo a los protocolos sanitarios, presidido por el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez. Casal, Ferreirós, Conde y compañía hicieron llegar su magia a través de YouTube a cientos de personas. Eso sí, las castañas de la indicación geográfica protegida de Galicia repartidas entre los asistente al final de la actuación para degustarlas en casa no pudieron traspasar las pantallas.