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La Festa do Queixo reivindica sus raíces y avanza hacia el reconocimiento turístico nacional

Natalia Rodríguez Noguerol
Natalia Noguerol SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Las queixeiras tradicionales y los promotores, hace 50 años, de la fiesta recibieron un homenaje en la
jornada inaugural de la cita, que abrió sus puertas a nuevas queserías de otras regiones y países

15 mar 2025 . Actualizado a las 22:37 h.

Óscar Pérez Ramil tuvo que tomar la palabra este sábado en representación del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Arzúa-Ulloa, que, con 5,5 millones de quesos con contraetiqueta en 2024, reforzó su posicionamiento, detrás del queso Manchego, como la segunda DOP de quesos de España. «A primeira de queixos feitos con leite de vaca», puntualizó Ramil en la apertura oficial del 50 aniversario de la Festa do Queixo. No pasaba ni media hora del mediodía y el presidente de Arzúa-Ulloa, Luis Lamas, seguía dando vueltas en su vehículo en busca de aparcamiento.

La primera jornada de la cita gastronómico-cultural de Arzúa pintaba una edición inmejorable. La organización, que espera recibir a lo largo de todo el fin de semana a unas 40.000 personas, empezó con buen pie. Los cientos de personas que, el viernes por la noche, llenaron hasta la bandera los locales de hostelería para degustar los pinchos elaborados en el concurso de tapas de Arzúa-Ulloa, en el que el restaurante Pecar se impuso a las propuestas de una veintena establecimientos, daban la primera pista de lo que estaba por llegar.

Y ayer, pasadas las once de la mañana, el párking público acondicionado en una extensa explanada en el centro urbano recordaba al aparcamiento del Hospital Clínico de Santiago en hora punta. En el recinto ferial, que acoge una muestra sectorial con ochenta queserías (más que en ninguna otra edición) todavía estaba por llegar. Llegó después de un acto inaugural presentado por los humoristas Xan Veiga y Leti da Taberna, y en el que fueron varias las voces (entre ellas, la de la pregonera, la cocinera Lucía Freitas) que reivindicaron el papel en la economía doméstica de las mujeres del rural; y, muy en particular, de las que custodiaron y transmitieron el saber y hacer en la elaboración artesanal de quesos.

Pilar Camba, «matriarca e fundadora» de la arzuana Queixería Barral, representó a todas ellas, a las queixeiras de Arzúa, en el homenaje que recibieron por «ser gardiás do saber facer dun produto que levou o nome de Arzúa alén das nosas fronteiras», destacó el alcalde Xoán Xesús Carril.

En su intervención, el regidor de Arzúa, que dio un tirón de orejas verbal a la Xunta por la falta de apoyo económico para una fiesta que, reivindicó, «es un referente», también tuvo palabras de reconocimiento para quienes hace 50 años «tiveron a visión e a determinación de crear a festa», dijo. Representados por Jesús Bendaña, los artífices de la Festa do Queixo fueron, al igual que las queixeiras, homenajeados, porque, en su caso, «viron no queixo máis ca un alimento; viron cultura, festa e unión». Soñaron con «converter Arzúa na capital do queixo», y, medio siglo después, «é una realidade». Y sin exagerar.

Cualquiera lo puede comprobar en el recinto que acoge la muestra sectorial, y al margen de que en la jornada inaugural se haya llenado de gente hasta la bandera. La organización ya había anunciado que la presente era una edición de récord por el número de queserías participantes. Pero entre estas, además, desembarcaron productores que nunca antes habían pisado Arzúa, que trabaja para avanzar hacia el reconocimiento de la Festa do Queixo como Fiesta de Interés Turístico Nacional. «Tedes todo o apoio da Subdelegación do Goberno», dijo su representante, María Rivas, durante su intervención en el acto de apertura.

El respaldo institucional. Y los mimbres. Francisco Morejón y Jesús Ronco se trasladaron desde Extremadura con la Torta del Casar, premiada como mejor queso de España en la feria del sector que se celebra en el municipio cacereño de Trujillo. «No es que sea mejor feria una que la otra, pero la de Trujillo reúne a los mejores productores de España», explica el gerente de Quesería Los Casareños.

Además de su reconocida Torta de Casar, un queso cremoso, elaborado con leche oveja, cuajo vegetal de cardo, y de dos meses de curación, también son de la casa, «y de elaboración artesanal», el queso con vino, con romero, el de cabra bajo en sal, y el de oveja con hasta cinco meses de curación. El género de esta quesería extremeña es representativo de la variedad de producto expuesto para la venta en el recinto ferial, en el que también se estrena Nuno Alves, con una quesería en Soalheira, en el municipio portugués de Fundao, en la que elaboran el premiado como mejor queso del mundo en la última edición del certamen internacional World Cheese Award: el queso de oveja mantecoso de la firma Quinta do Pomar.

Las nuevas referencias en la muestra sectorial de la Festa do Queixo conviven con variedades más conocidas para los asiduos a la cita, como las que lleva a Arzúa, desde hace dos décadas, Olga Milla, de un centro de maduración agro sostenible, radicado en Vigo, en el que realizan «una selección en origen de quesos de pequeños productores que trabajan con leche propia, de ganado que pace en pastos naturales», explica la mujer, que despacha quesos franceses y suizos como, entre otros, el grullère, el comté, o la raclette, variedades «que traemos de allá para aquí, porque son productos que los gallegos consumían cuando estaban en la emigración», indica. Sobre la muestra sectorial confiesa que «para nosotros es muy buena, como la organización y la afluencia de gente. Además (añade), cada vez viene un público más especializado».

Y tantos años como Olga Milla acumula con su expositor en la Festa do Queixo Salvador José Carreira, la segunda generación de Lácteos Terra de Melide, una quesería con actividad en el municipio melidense en la que elaboran  Arzúa-Ulloa, también curado, y Tetilla, además de otras variedades ya sin DOP, como queso picante, queso de barra, y queso de cabra. La variedad anfitriona «é a que máis se vende», apunta Carreira. Sobre el 60 por ciento del total de la mercancía, que despacha a un precio asequible (a 8 euros está la unidad próxima a 1 kilo de Arzúa-Ulloa y de Tetilla), porque «o que intento é que a xente probe e me coñeza, non veño exclusivamente a vender», sostiene el productor.

Y en el, a la vista está, mayor escaparate de quesos de la comunidad gallega tampoco faltan los elaborados por las Productoras Lácteas Tradicionales. Son minoría en la muestra sectorial, pero ahí siguen recordando a las mujeres queixeiras que tantos halagos cosecharon en el acto inaugural de la Festa do Queixo. Subdelegada del Gobierno, diputada provincial de Igualdade, y alcalde de Arzúa coincidieron en sus palabras de reconocimiento hacia ellas, «amas da terra que levan vida na cabeza e fan posible que Galicia sexa o que é a día de hoxe», remachó la pregonera.