El Concello estudia el cierre o la gestión directa como opciones provisionales tras su decisión de no prorrogar el contrato
15 mar 2021 . Actualizado a las 20:19 h.El Concello de Teo ha decidido no prorrogar el contrato de gestión de la piscina climatizada de A Ramallosa que asume la empresa BeOne y que vence el próximo mes de abril. En el trasfondo de esta decisión están las consecuencias que la pandemia está teniendo sobre determinados servicios como los gimnasios, las dificultades para hacer frente a las pérdidas económicas de este tipo des instalaciones y la interpretación que el Concello y la empresa hacen de las alternativas para afrontar esta realidad.
La empresa solicitó el año pasado la prórroga del contrato y planteó la imposibilidad parcial de cumplir las condiciones del mismo por el coronavirus, por lo que demandó al Concello una compensación económica. Sus peticiones fueron debatidas por la corporación municipal en el pleno ordinario de diciembre y todas fueron desestimadas por el grupo de gobierno (Son de Teo y PSOE) y el PP, mientras que el BNG optó por la abstención.
La razones aducidas por el Concello para rechazar la ampliación del contrato, según informó en la sesión de diciembre el edil de Deportes, Ignacio Iglesias (Son de Teo), y que reiteró ayer, inciden en que al tratarse de una prórroga no cabe modificación alguna, y el contrato recoge que el Concello debe mantener el equilibrio económico del servicio. Y ante la alta posibilidad de que las restricciones de movimientos por la pandemia se dilaten en el tiempo, Iglesias defiende que «a decisión máis lóxica para salvagardar mellor os intereses do Concello é desestimar esta solicitude de prórroga», ya que el coste económico para las arcas municipales podría ser muy elevado.
Ante esta situación, las opciones provisionales que baraja el Concello pasan por el cierre temporal de las instalaciones o asumir una gestión directa, ya que la alternativa de iniciar un nuevo proceso de licitación, reconoce Iglesias, no sería garantista porque «ningunha empresa vai ir a unha licitación nun escenario tan imprevisible como este».
Servicio seguro y de calidad
A medio plazo, la opción que parece más factible es la convocatoria de un nuevo concurso, una fórmula, aclara Iglesias, que implicaría la subrogación directa del personal del servicio. Si finalmente se cierra la instalación, la plantilla podría solicitar el subsidio de desempleo hasta que se resolviese la licitación. Y si se opta por la gestión directa se asumiría al personal.
La piscina, con las instalaciones complementarias del gimnasio, actualmente tiene unos 2.500 usuarios (aproximadamente la mitad que antes de la pandemia) y veinticinco trabajadores. La empresa gestora de las instalaciones deportivas aclara que solicitó en tiempo y forma la prórroga de la concesión prevista en el contrato. En espera de una reunión que la representación municipal y de la gestora de centros deportivos BeOne mantendrán este lunes, la empresa señala que el Concello teense le trasladó su intención de cerrar la piscina a mediados de abril y destaca que desconoce los motivos por los que le fue denegada la prórroga.
BeOne considera muy satisfactoria su gestión de las instalaciones municipales de A Ramallosa por la calidad y la alta demanda del servicio, no solo en Teo sino de usuarios residentes en otros del entorno, tanto particulares como a través de distintas asociaciones y colectivos, así como las actividades deportivas programadas por el Concello para un público de todas las edades.
Además, durante la pandemia, la piscina se ha mantenido a disposición de los usuarios cumpliendo todas las medidas para convertirla en un espacio seguro y sin que haya tenido incidencias derivadas del covid, explican sus gestores, que destacan el esfuerzo de los trabajadores del centro y la alta concienciación de los usuarios para conseguirlo.
Reclamación de cien mil euros
En paralelo al fin de la concesión, empresa y Concello deben cerrar un acuerdo sobre el reequilibrio patrimonial que reclama BeOne, que demanda cien mil euros.
El cálculo del área de Intervención de Teo es prácticamente la mitad. La explicación técnica para la diferencia de cantidades, según se expuso en el pleno de diciembre que rechazó la prórroga del contrato, tiene que ver con la fórmula para calcular las pérdidas y el importe al que tiene derecho la concesionaria. La empresa lo hace en base a los ingresos no recibidos y el Concello aplica un porcentaje del 6 % del beneficio industrial. Y solo computa el tiempo del estado de alarma, ya que entiende que para el resto no hay amparo legal.