Recuperan los cuerpos de cuatro guerrilleros fallecidos en 1949 tras un enfrentamiento con la Guardia Civil
28 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Cuando faltan tres jornadas para el día de Fieles Difuntos, en el que las familias recuerdan a sus muertos con flores en sus tumbas, los descendientes de José María Castelo Mosquera, Vicente Peña Tarrasa, Manuela Teiga y posiblemente los de Erundino Vieito Baña o Manuel Peña Camiño, miembros de un grupo de la resistencia comunista, podrán hacerlo en breve en las sepulturas que ellos hayan elegido y no en la fosa común del atrio de la iglesia dubresa de Santa María de Paramos, en la que permanecieron enterrados, pero no olvidados, desde que el 5 de marzo de 1949 fallecieron tras enfrentarse con la Guardia Civil cuando huían de su escondite, en una vivienda de Zas, en Negreira.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ha promovido el descubrimiento de estos cuerpos mediante unos trabajos de excavación que comenzaron a principios de esta semana y que concluyeron ayer con el traslado de los restos localizados ya el primer día, dado que existía documentación y testimonios del lugar de la fosa.
Ahora, esta asociación con sede en Ponferrada seguirá trabajando desde allí para confirmar su identidad y esclarecer las causas y las circunstancias de su fallecimiento.
A la recuperación de la memoria de estos guerrilleros ha contribuido José Manuel López Tuñas, profesor e investigador de Negreira que ha estado presente en los trabajos de excavación de estos guerrilleros, cuya trayectoria lleva años investigando. Estuvo en Paramos junto con numerosos vecinos de Santa Comba, A Baña, Negreira y Val do Dubra, entre los que se encontraban familiares directos de algunos de los fallecidos, que aportaron testimonios, documentos y también prueba biológicas para cotejar el ADN.