
La actriz advierte que la nueva comedia que protagonizará junto a Thomas Haden Church no tiene nada que ver con «Sexo en Nueva York»
08 oct 2016 . Actualizado a las 20:16 h.Por las calles de Nueva York vuelven a circular autobuses con la imagen de Sarah Jessica Parker. Doce años después de que acabara Sexo en Nueva York lo que publicitan ahora es Divorce, la nueva serie que la actriz estrena este domingo en televisión.
Hasta la fecha, siempre que se le preguntaba a la actriz cuándo volvería a una serie de televisión, ella respondía «nunca». En una entrevista reciente dijo: «Cuando llegas a un punto en tu vida en que tienes que tomar decisiones, también puedes decidir decir no. Y eso está realmente bien».
Y sí, dijo que echaba de menos su papel de columnista Carrie Bradshaw en la exitosa serie Sexo en Nueva York. «Pero la echo de menos como también echo de menos el parto de mis hijos, uno echa de menos momentos maravillosos, pero no se lamenta de nada».
En los últimos años, la intérprete de 51 años ha hecho de todo menos quedarse quieta. Hizo dos películas basadas en Sexo en Nueva York (que la crítica destrozó), así como otras películas de Hollywood. También se subió a los escenarios del teatro, ha diseñado zapatos, perfumes o ropa y promociona, entre otras causas, el ballet de Nueva York. Además, es madre de tres hijos junto al también actor Matthew Broderick.
Pero Divorce le atrajo, dijo Parker, que además también es productora. El título ya anticipa la trama: Frances (Parker) y Robert (Thomas Haden Church) se divorcian. Sin embargo Divorce es una comedia.
«El divorcio es triste y (algo que pasa) de verdad, pero también es absurdo. Nosotros hemos buscado el humor», explicó la actriz. «A menudo en televisión o en el cine, cuando se trata un divorcio, se ve una batalla implacable o gente rica que se pelea. Yo quería contar otra historia, una que se no hubiese visto antes en televisión».
La intérprete asegura que la nueva serie no tiene nada que ver con el mundo de Carrie Bradshaw. La protagonista «no es una Carrie de periferia, que va todos los días al centro de la ciudad», dijo la actriz, que advierte para que no sea «una gran decepción», ya que la serie no será tan divertida.
Y con su personaje la actriz no tiene nada en común, insiste Parker. «Yo sólo tengo su aspecto y ya está», dijo. Matthew Broderick (su marido) «sigue siendo la persona con la que yo quiero vivir cosas y con la que quiero hacer cosas». La actriz comenta que no sabe por qué la prensa del corazón sigue difundiendo rumores sobre su matrimonio. «¿Tal vez es sencillamente porque todavía seguimos casados? ¿Será que eso irrita?».