La boda roja, el final de Ned Stark y secuencias de batalla memorables alimentaron la conversación en torno a una serie con una repercusión sin precedentes
20 may 2019 . Actualizado a las 11:36 h.Juego de tronos pone punto final a su gesta en medio de una expectación mundial que no ha sido fruto de una campaña de márketing ni producto de la casualidad. Los responsables de HBO pusieron a disposición de los creadores de la adaptación de Canción de hielo y fuego todos los recursos que consideraran precisos para poner un colofón memorable a una serie ambiciosa que ha hecho historia de la televisión. Los 47 premios Emmy logrados desde su estreno en el 2011 son solo el certificado oficial que acompaña a un éxito de público sin precedentes, conquistado con momentos y giros sorprendentes desde el primer episodio.
Su progresión de seguidores solo en Estados Unidos entre la primera y la séptima temporada registró un crecimiento exponencial, al pasar de 2 millones en el 2011 a 10 millones en el 2017. Esto se explica por la capacidad que ha tenido esta ficción para marcar hitos que a lo largo de las temporadas alimentaron teorías, especulaciones y temas de conversación que le sirvieron para ganar cada vez más adeptos. Estos fueron algunos de los momentos más comentados de Juego de Tronos. (Contiene spoilers para los que no han visto la serie)
«Baelor» (1x09)
Tal vez no sea el mejor capítulo de la ficción, pero fue el primer momento en el que los espectadores confirmaron que estaban ante una serie diferente a todo lo que se había hecho hasta entonces, algo que ya venían sospechando desde el primer episodio. Con la valentía de quien tiene entre manos un proyecto de proporciones colosales, Juego de tronos decapitó sin remilgos al bueno de Ned Stark, que parecía llamado a ser el protagonista que guiaría la historia. Su cabeza acabó clavada en una pica y su muerte desencadenó sufrimientos y deseos de venganza arrastrados hasta el final.
«Las lluvias de Castamere» (3x09)
Las lluvias de Castamere es su titulo oficial, pero será conocido por siempre como La boda roja. Fue el otro gran punto de inflexión de la serie por su capacidad para dejar al público sin aliento. Si los Stark ya arrastraban el dolor por la muerte del patriarca, aquí la familia del norte fue arrasada en un desenlace trágico que hizo historia.
«El león y la rosa» (4x02)
Juego de tronos no es una serie de amor y casarse es una idea que aquí nunca ha salido bien. Este episodio contenía otra boda para la historia en la que se ejecutó una venganza, pero en este caso era una que complacía al espectador: la muerte del sanguinario rey Joffrey Baratheon, hijo del incesto entre Cersei y Jaime.
«La batalla de los bastardos» (6x09)
Si las bodas han sido memorables a la hora de ajusticiar a los personajes, ha sido en las las batallas donde la serie ha demostrado no solo un despliegue técnico sin precedentes, sino también una nueva forma de narrar las guerras técnicamente perfecta. Quienes han visto La batalla de los bastardos guardan en su retina secuencias épicas que no olvidarán jamás. Su director fue Miguel Sapochnik, el mismo que condujo en la octava y última temporada las batallas de Invernalia y de Desembarco del Rey. Al final muere de forma cruel uno de los personajes más odiados de toda la serie.
«Casa Austera» (5x08)
También a cargo de Sapochnik, este episodio contiene otra memorable batalla en la que por primera vez Jon Nieve, Tormund y la Guardia de la Noche se encuentran de frente con los Caminantes Blancos y observan con terror el gran poder de su líder: con solo elevar sus brazos hace revivir a los muertos y los convierte a su ejército a de zombies. Nieve descubre que el acero valyrio puede acabar con ellos. En Desembarco del Rey, Cersei tiene que lamer el suelo de la celda donde ha sido encarcelada por Gorrión Supremo.
«Misericordia» (5x10)
El final de la quinta temporada dejó a los seguidores durante meses con el aliento contenido tras el apuñalamiento de Jon Nieve a manos de algunos miembros de la Guardia de la Noche. La conmoción por el héroe fue mundial. Otro de los grandes momentos que este episodio dejó para la serie fue el paseo de la vergüenza de Cersei.
«El portón» (Hold the Door) (6x05)
Fue uno de los episodios más comentados y emotivos de la serie. En él se reflejaba el origen del nombre de Hodor y cómo este muere al salvar a Bran del ataque de los muertos vivientes. Además, el tullido Stark descubre que fueron los Hijos del Bosque los que crearon a los Caminantes Blancos clavándole una daga de vidriagón a uno de los Primeros Hombres.
«El dragón y el lobo» (7x07)
Pozo Dragón acoge una gran cumbre en la que Cersei y Daenerys se ven por primera vez las caras. La madre de dragones se luce haciendo un aterrizaje efectista a lomos de Drogon. Jon Nieve muestra a la reina Lannister un ejemplar de Caminante Blanco con el fin de que se una a la causa de luchar contra el temible ejército del Rey de la Noche. El invierno está llegando y empieza a caer nieve en el Sur. Sansa y Arya ajustician a Meñique. El lobo solitario muere, pero la manada sobrevive. Jon y Daenerys consuman su relación, mientras, en paralelo, se revela que él no es en realidad el bastardo de los Stark sino Aegon Targaryen, sobrino de Khaleesi.
«Caballero de los siete reinos» (8x02)
Después de tantas batallas y tantas historias, en el arranque de la temporada final los creadores de la serie quisieron darle a sus personajes y a los espectadores un cuidado episodio lleno de momentos conmovedores para poder despedirse como se merecían antes de la batalla de Invernalia y el fin de los tiempos. Como si dijeran: «¡Miradlos bien! Ahí los tenéis, juntos por ultima vez». No hubo acción, es cierto, y la trama tampoco avanzó, pero no le hizo falta.
«La larga noche» (8x03)
Fue oscuro, sí, pero se veía todo lo que se tenía ver. Esa falta de iluminación contribuyó a crear la atmósfera tenebrosa de la batalla de Invernalia, la secuencia bélica más larga jamás filmada y uno de los episodios más inquietantes que se han visto en televisión. La tensión traspasó la pantalla. La sorpresa con el destino que corrió el Rey de la Noche fue mayúscula y estuvo fuera de todas las teorías y predicciones.
