La actriz Sarah Lancashire encarna a la popular chef estadounidense en una nueva serie que este jueves llega a HBO Max
31 mar 2022 . Actualizado a las 08:56 h.Julia Child es la gran referencia de los fogones en la televisión de Estados Unidos, si bien en Europa no tuvo esa repercusión. Desde su programa The French Chef, en antena durante una década entre mediados de los sesenta y mediados de los setenta, conquistó terrenos nuevos para las mujeres, como la cocina profesional y la pequeña pantalla. Su figura, a la que dio vida en el cine Meryl Streep en la película Julie & Julia, regresa a su medio primigenio en una serie biográfica. HBO Max estrena hoy los tres primeros capítulos de Julia, inspirada en la extraordinaria vida de esta cocinera y ambientada en un momento de cambios en la sociedad norteamericana como el surgimiento de la televisión pública como institución social, el feminismo, el culto a las celebridades y la evolución cultural de Estados Unidos.
Ahora es la actriz Sarah Lancashire (Happy Valley) la que se mete en la piel de esta experta en los fogones que vivió varias vidas en una sola. Durante la Segunda Guerra Mundial se fue a China a trabajar para los servicios de inteligencia estadounidenses. Quería ser espía, pero la consideraron demasiado alta para el trabajo, por lo que su tarea fue burocrática. Mezclando ingredientes consiguió crear un repelente para tiburones que impidiera que estos se acercaran a las bombas colocadas en el mar. Durante su etapa en el ejército también conoció a Paul Cushing, su marido y gran apoyo.
Sus recetas llegaron a varias generaciones de espectadores a través de sus programas y libros de cocina. Pero también tuvo facetas controvertidas y contradictorias. A pesar de ser pionera en un mundo de hombres, no fue defensora del feminismo. Se le afean aún algunos cometarios homófobos que pronunció.
«Todos sabemos cómo era Julia Child en público. Se puede ver en YouTube, en sus programas, se puede leer en sus libros. Lo que no sabemos y queremos saber es cómo era Julia detrás de las cámaras. Quería hacer una Julia lo más real posible», afirma Sarah Lancashire.