Estreno de «El nombre de la rosa», la adaptación televisiva de la novela de Umberto Eco

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

PLATA O PLOMO

La miniserie puede verse Cosmo cada jueves

22 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Llega la miniserie El nombre de la rosa, aclamada adaptación de la novela homónima de Umberto Eco. Un espectacular elenco encabezado por John Turturro, Ruppert Everett, Michael Emerson, Damian Hardung y Antonia Fotaras protagoniza este titánico proyecto, grabado en los estudios de Cinecittà, en Roma, por el director italiano Giacomo Battiato.

En 1327 el fraile franciscano inglés Guillermo de Baskerville y su discípulo, el novicio Adso de Melk, acuden a una abadía del norte de Italia donde se dirimirá un cisma ideológico clave dentro del cristianismo. ¿Debe la Iglesia ser pobre imitando el ejemplo de Cristo, como defiende el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, o requiere poder y riqueza para gobernar sobre el mundo occidental, como sostiene la legación papal enviada por Juan XXII? En el trayecto, Adso conocerá a una muchacha (Antonia Fotaras) que despertará su curiosidad.

La celebración de este cónclave se ven amenazados por los secretos de la abadía, donde uno de los monjes, el ilustrador Adelmo de Otranto, muere en extrañas circunstancias. El abad (Michael Emerson) pide a Guillermo que investigue el crimen antes de la reunión, a la que acudirá un viejo rival del franciscano: Bernardo Gui (Ruppert Everett), el sádico inquisidor enviado por el papa. Para descubrir la verdad, Guillermo y Adso cruzan las puertas prohibidas de la mayor biblioteca del mundo medieval: un inmenso laberinto de trampas, emboscadas y pasadizos aparentemente inaccesibles donde sus vidas, y su cordura, corren peligro.

A lo largo de ocho episodios se sumerge al espectador en esta compleja e inquietante historia, una mezcla de thriller detectivesco al estilo de Sherlock Holmes, drama de época medieval y disertación filosófica. Algunos de los temas absolutamente contemporáneos que aborda son el fundamentalismo como portador de muerte, la riqueza como fuente básica de poder, la religión como instrumento político capaz de crear conflictos, el oscurantismo como enemigo del placer, el conocimiento como única llave para alcanzar la libertad o el poder subversivo de la risa.