
La Monarca, especie migratoria, atraviesa el Atlántico en cuatro días y puede ser vista en Galicia.Un ferrolano y el Ceida, en Oleiros, promueven su estudio
30 oct 2002 . Actualizado a las 06:00 h.Tan frágil, como una mariposa que recorre el Atlántico en cuatro días. Velocidad de crucero: 35 kilómetros por hora. La Monarca no se cansa ni despista, pero en su ruta migratoria para reproducirse, desde América del Norte hasta México, algunos ejemplares se desvían a Galicia. Un capricho volador de color rojo que es un misterio. Los efectos de las corrientes, o el asentamiento en nuevos territorios, los expertos no coinciden al determinar las causas de su aparición en otoño. Pero el caso es que, sin embargo, viene. La mariposa más famosa del mundo es la más grande. Por su milagrosa hazaña y por su tamaño: mide, con sus alas abiertas, once centímetros. Eliseo Fernández, lepidopterólogo ferrolano, promueve su avistamiento. No es un ovni. «Es como ver un elefante. Es inconfundible», dice. El experto presentó ayer en el centro de divulgación ambiental de Santa Cruz (Ceide), en Oleiros, la Operación Monarca , para despertar la afición por las pequeñas cosas. Como lo es una Monarca. Que, además, sirve de símbolo de unión del libre mercado de EE.?UU., México y Canadá. Ella llega a todas partes. La iniciativa de Eliseo Fernández cuenta también con el apoyo del grupo naturalista Hábitat. El objetivo es ver a la Monarca. «Es difícil, porque miramos cuatro», afirma Fernández. Pero ha sido contemplada en numerosos puntos de las costas gallegas. Esta curiosidad animal ha llevado al insecto a aparecer por el mismo centro de A Coruña. «Yo la volví a ver en la plaza de España», relata. Un paso más en el intento de esta especie por colonizar y que desde hace un siglo hace incursiones por diferentes partes del mundo. En la península se adaptó en la zona Sur, pero finalmente la especie se extinguió. En las islas Canarias, en cambio, se detecta la presencia de una numerosa colonia. Aunque en el caso gallego no llegan en un gran número. Operación Monarca pretende que cada uno que aviste alguna de estas especies se dirija al Ceide para contabilizar su paso. Cinco generaciones Una visita que paradójicamente conduce a la Monarca a su muerte sin cumplir el ciclo vital de su reproducción. Esta mariposa tiene a lo largo de su vida cinco generaciones, lo que da prueba, según los expertos, de que se trata de un animal longevo con una existencia de unos ocho meses. Eliseo Fernández quiere reclutar aficionados para que cuando se produzca la visita de la Monarca haya alguien que la reciba, tome nota del sitio y la hora en la que fue vista. El resto es fácil: dejarla volar. Pura cortesía. Una postal, editada por el Ceida, facilita la incorporación de los datos para que sean dirigidos al castillo de Santa Cruz. El artífice de la experiencia, Eliseo Fernández, lleva cuarenta años mirando al cielo para encontrar mariposas. Y desde hace veinte, a la caza simbólica de la Monarca. Fernández ha publicado dos guías especializadas publicadas por la Diputación y la Casa de las Ciencias de A Coruña. «Sólo quiero dejar una semilla para que la gente valore la riqueza de la naturaleza y contemplar los animales que llegan a estas tierras. También vienen mariposas», afirma. Y entre ellas, la Monarca. Un animal fuerte de apariencia débil. Que se alimenta con proteínas potentes y que sabe resistir los vuelos largos. Un insecto con un esqueleto resistente. Todo, para ser la mariposa más famosa del mundo. La que protagoniza una de las migraciones más espectaculares desde América del Norte hasta tierras mexicanas. Y, si la Operación Monarca triunfa, será reconocida por los aficionados cuando algunos ejemplares se trasladen a Galicia. «Es la que siempre sale en la televisión», aclara.