
El cuadro, subastado ayer en Sotheby¿s, es el más caro del mundo
06 may 2004 . Actualizado a las 07:00 h.La pintura del artista español Pablo Picasso Garçon á la pipe correspondiente al «periodo rosa» superó anoche todos los récords que se conocen en pintura al ser adjudicada en 93 millones de dólares (77,5 millones de euros, unos 12.900 millones de pesetas) en una subasta celebrada en Sotheby?s. Garçon á la pipe («Chico con pipa») fue pintada por Picasso cuando solo tenía 24 años, en 1905, y está considerada en el mercado como «una obra maestra muy rara». El precio más alto pagado hasta ahora por un Picasso fue por una obra del «período azul» (1901-1904), Femme aux bras croisés, subastada por la firma rival, Christie?s, en noviembre de 2000 y que alcanzó los 45,8 millones de euros. Garçon á la pipe batió el récord de recaudación al superar los 82,5 millones de dólares logrados por el Retrato del Dr. Gachet, de Van Gogh. Garçon á la pipe tuvo solo un comprador antes de llegar en 1950 a la colección del editor, diplomático y filántropo John Hay Whitney y de su esposa Betsey Whitney, quien, al morir, en 1998, dejó un conjunto de obras con un valor de 300 millones de dólares a varios museos estadounidenses. El cuadro terminó en la Fundación Greentree, creada por los Whitney, y el hecho de que pasara por tan pocas manos constituye una ventaja más para los coleccionistas preocupados por el origen de las obras que compran. Según el responsable del departamento impresionista de Sotheby?s, Charles Moffet, coleccionistas como esta fundación desean convertir algunas de sus propiedades en dinero en efectivo después de tres años de récord en las subastas, en las que parece consolidarse la tendencia entre los compradores a ser más selectivos. La pieza fue vendida dentro de un conjunto de 34 pinturas y dibujos que tienen una valoración total de entre 131 y 157 millones de dólares. El lienzo que había creado esta temporada tantas expectativas fue pintado por Picasso tras establecerse en el barrio parisiense de Montmartre y se cree que el modelo fue un muchacho que merodeaba por su estudio, al que representa con una pipa en una mano y con una corona de flores en la cabeza.