EN FORMA. De izquierda a derecha y de arriba a abajo: Sheryl Crow, Renee Zellweger, Sarah Jessica Parker y Jennifer Garner. Son guapas, famosas y todas esculpen sus cuerpos en los gimnasios Ni sexies ni escurridas. Cachas. Así son las chicas de Hollywood, y teniendo en cuenta lo que tardamos nosotros en asumir como propios sus cánones de belleza, me veo haciendo más horas en el gimnasio que en La Voz, lo cual ya sería un mérito. Las últimas galas artísticas -el domingo en Pasadena y el sábado en Las Vegas- nos han dejado para el recuerdo escenas de mujeres musculosas pero con glamur. La mejor sin duda es la imagen de Sheryl Crow que, ahora que su novio, el ciclista Lance Amstrong, parece haber anunciado que no volverá a participar en un Tour de Francia, bien podría presentarse ella. Otra que en cualquier momento puede convertirse en la Schwarzenegger de las chicas, y no sólo por el apellido, es Renee Zellweger, que después del bochornoso Bridget Jones 2 (no conozco a ninguna mujer de mi quinta tan obsesionada por casarse) tal vez quiera hacer hulka o algo así. Biceps no le faltan. En un escalón inferior hay otras bellezas del momento, como la más fashion del mundo mundial, Sarah Jessica Parker, cuyo personaje de Carrie Bradshaw en Sexo en Nueva York es, lo reconozco, mi ídolo absoluto. Parker en los últimos tiempos está ganando tanto músculo que si por casualidad al llegar a alguno de esos maravillosos bares que frecuenta el chico más atractivo e interesante no se le acerca (tal y como le ocurre ahora) lo puede agarrar de las solapas y llevárselo a rastras a su cueva. Y termino esta lista con una cara relativamente nueva pero que promete mucho en este universo gym: Jennifer Garner, protagonista de la serie televisiva de espías Alias . La novia del blando Ben Affleck parece haber asumido las carencias de su recién estrenado amor y se ha puesto tan cachas que el otro día en Las Vegas en el estreno de Elektra se descubrió como la verdadera alterego de Daredevil , el personaje de su chico y donde, parece ser, saltó la chispa entre ellos. causa estragos allí por donde va. No sólo europeos y americanos se deshacen al mirarla, sino que su lógico éxito se extiende por todo el mundo, hasta los jemeres rojos. A ver, les cuento: los antiguos jemeres rojos, es organización maoísta que asesinó a casi dos millones de camboyanos creen que la presencia de Jolie en Samlot (una de las antiguas plazas fuertes del partido) ha llevado el desarrollo a la zona. La actriz vivió una temporada en Camboya en el 2002, durante el rodaje de Tomb Raider y tanto le gustó que no sólo se compró una casa en el lugar, sino que comenzó un duro trabajo para salvar los bosques y animales de la zona, así como para mejorar las condiciones de vida de los vecinos. Precisamente de allí es su hijo Maddox , al que de vez en cuando lleva a su patria para que no pierda la raíces, en un gesto que le honra. Sin embargo, últimamente no visita mucho el país y los antiguos comunistas la echan de menos. Termino este artístico artículo con una nota de la más rancia aristocracia. La muerte de la gran duquesa Josefina Carlota de Luxemburgo, madre del actual jefe del Estado, el gran duque Enrique y hermana del rey de los belgas, Alberto II. Según la casa real luxemburguesa, los funerales se celebrarán en la más estricta intimidad el próximo sábado en la catedral de Nuestra Señora de Luxemburgo. La gran duquesa Josefina Carlota falleció en el castillo de Fischbach, a los 77 años de edad, víctima de un cáncer de pulmón que se le diagnosticó hace casi dos años. Hija del rey de los Belgas Leopoldo II y de la reina Astrid , Josefina Carlota se casó en 1953 con el príncipe Juan, entonces Gran Duque heredero de Luxemburgo. Era por tanto hermana del anterior rey belga, Balduino (y cuñada, asimismo de la española Fabiola de Mora y Aragón ) y del actual monarca, Alberto, la mayor de los tres y tenía tan sólo ocho años cuando su madre, la querida reina Astrid, murió en accidente de coche.