Sólo los populares, excepto Celia Villalobos, y los democristianos de Unió votaron en contra Los gais y lesbianas podrán casarse antes de verano con iguales derechos que los heterosexuales
21 abr 2005 . Actualizado a las 07:00 h.El Congreso de los Diputados vivió ayer una jornada histórica con la aprobación de uno de los proyectos estrella del Gobierno, la ley que permite contraer matrimonio a las parejas homosexuales y les reconoce su derecho a adoptar. El proyecto de ley se aprobó por 183 votos a favor, 136 en contra y seis abstenciones. Sólo el PP y los cuatro diputados democristianos de Unió Democràtica de Catalunya, partido integrado en CiU, votaron en contra. La ex ministra de Sanidad Celia Villalobos se desmarcó de la disciplina de su grupo y apoyó el texto que modifica el Código Civil. Los grupos parlamentarios de CiU y el PNV dieron libertad de votos a sus diputados. Para sus partidarios esta auténtica revolución social que cambia el concepto tradicional de familia sitúa a España en la vanguardia mundial, junto a Holanda y Bélgica. Para sus detractores, es un enorme paso atrás. El texto deberá pasar ahora por el Senado para posteriormente ser ratificado de forma definitiva por la cámara baja, por lo que los gais y lesbianas podrán casarse antes del inicio del verano, según el ministro de Justicia Juan Fernando López Aguilar. Éste defendió el proyecto porque «supera las barreras de discriminación, muchas de profunda raíz histórica o atávica, que afectan a derechos y libertades». La diputada popular Ana Torme criticó al Gobierno por actuar «como si el matrimonio fuese la única alternativa para acabar con la discriminación». Aseguró que su grupo defiende la regulación civil de las parejas de hecho, como en Alemania, Francia o Gran Bretaña, y la equiparación de derechos, excepto la adopción. Carmen Montón, del PSOE, consideró que esta reforma «amplía el concepto de ciudadanía y profundiza en la democracia» y acusó al PP de contribuir a la homofobia.