«Dar de comer antes de evangelizar» era el lema del cura capuchino Jacques Chirac anunció que se le rendirá un homenaje nacional el viernes en Notre Dame
17 jul 2024 . Actualizado a las 20:15 h.Francia rendirá este viernes homenaje nacional al abate Pierre, el defensor de los desheredados que falleció la madrugada del lunes a los 94 años de una infección pulmonar. Ese mismo día se celebrará el funeral en la catedral de Notre Dame de París, mientras se espera que miles de personas se acerquen hasta la capilla ardiente que mañana se instalará en el hospital Val-de-Grâce donde vivió sus últimos días. El presidente de la República, Jacques Chirac, ha decidido concederle los mismos honores que en su día recibieran el oceanógrafo Jacques Cousteau y el papa Juan Pablo II. Chirac se declaró ayer «conmovido» ante la muerte de quien «representará siempre el espíritu de la rebelión contra la miseria, el sufrimiento y la injusticia». El país entero lo llora. El ministro de Cohesión Social, Jean-Louis Borloo, proclamó ayer que la ley sobre el derecho a la vivienda que el próximo día 30 llegará al Senado «es la ley del abate Pierre y debe llevar su nombre». El texto ha sido la respuesta del Gobierno a la movilización de los Hijos de don Quijote, que instalaron campamentos de sin techo en las principales ciudades francesas para denunciar la falta de alojamientos dignos. Fue la lucha de toda una vida para el abate Pierre. Será enterrado en la intimidad en la pequeña localidad de Esteville, como él había previsto, rodeado por sus traperos de Emaús y con cantos gregorianos. El ex primer ministro Laurent Fabius propuso ayer que le enterraran en el Panteón, junto a los grandes de Francia. La Unesco, el Consejo de Europa y la presidenta de Suiza, Micheline Calmy- Rey, se sumaron al pesar generalizado en Francia. El director de los grupos de Emaús en España, Javier Pradini, dijo de él que dedicó su vida «a combatir la pobreza, las desigualdades y la injusticia».