Educación garantiza que sus ayudas cubrirán la gratuidad de los libros

Xavier Lombardero

SOCIEDAD

Padres y profesores piden poder cotejar ?las subvenciones de la Xunta con los precios de las tiendas

16 jun 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

¿Serán por fin totalmente gratuitos para las familias los libros de texto del curso 2008-2009? Es lo que se preguntan muchos padres que el pasado año tuvieron que desembolsar diversas cantidades al no alcanzar para ciertos manuales la subvención de la Xunta, debido al precio fijado por algunas librerías. La Consellería de Educación ha incrementado hasta un 11% los importes máximos de los lotes en este programa para centros públicos y concertados, lo que supondrá invertir 26 millones de euros. Las cuantías se fijan realizando una estimación del coste medio, incrementando como mínimo el IPC. Desde los centros y asociaciones de padres recomiendan a los progenitores que, una vez conocido el listado de los libros del curso, se coteje el precio final en las librerías, antes de hacer la reserva.

La ampliación de la gratuidad de los libros de texto (un préstamo, si exceptuamos los cursos primero y segundo de primaria) fue de las primeras medidas implantadas por el Gobierno Touriño, pero la reutilización de los manuales genera un fuerte rechazo entre editores y libreros, y advierten en cada comunidad que tal medida pone en riesgo la industria cultural y que beneficia a las grandes superficies.

La Asociación de Editores de Galicia, la Federación de Libreiros de Galicia y la Asociación Nacional de Editores, destacan el informe realizado por la Unidade de Psicoloxía do Consumidor e Usuario de la Universidade de Santiago, según el cual padres, profesores y directivos docentes rechazan el sistema de préstamo y abogan por ayudas directas canjeables en las librerías, como pueden ser el bono-libro o la tarjeta electrónica.

Los editores rechazan el sistema de préstamo (dicen que tampoco garantiza la gratuidad total) porque el mantenimiento de los libros supone un grave problema para los padres.

No al préstamo

«Entre el 16% y el 18% considera que sus hijos recibieron los libros en mal estado o sucios. Para los profesores supone un grave inconveniente el no poder trabajar directamente en los libros de texto, por lo que se ven obligados a recurrir con más frecuencia a las fotocopias como recurso didáctico. Un 24,5% de los profesores afirma haber incrementado el uso de fotocopias para desarrollar la docencia». Según ese informe, la gran mayoría de los progenitores declara no estar muy satisfecho con el modelo, pero el 18% sí está contento con el ahorro que supone.

En cambio, alaban el sistema asturiano y cántabro de ayudas directas, implantado desde el 2005, porque «garantiza la propiedad de los manuales y la utilización de estos como principal herramienta de trabajo y aprendizaje». Permiten «subrayar, usar los libros libremente realizando anotaciones que facilitan el recuerdo y el aprendizaje, y consultarlos en cualquier momento del ciclo natural lectivo». En este sistema, dice el estudio, el 65,8% de los padres también valoran el ahorro económico.

«Las familias asturianas invierten anualmente en cada hijo una media de 180 euros en libros de texto, cantidad que supone el 43% del gasto total que dedican al inicio de cada curso a la compra de libros y otros materiales escolares de apoyo. Para ayudar a sobrellevar mejor este gasto, el Gobierno del Principado de Asturias concede ayudas económicas directas al 88% de los alumnos de ESO con rentas más bajas. Con estas ayudas, que ascienden a 90 euros en primaria y a 130 euros en la ESO, el gasto real de las familias asturianas pasa a ser de 76 y 69 euros, respectivamente». Es decir, cifran una inversión media de 166 y 199 euros, inferior, según estos datos, a lo que financia en Galicia la Xunta en algunos niveles y de forma universal, pues para el próximo curso los importes para reponer los textos de cada alumno de primero y segundo de primaria son 150 euros, 160 euros en tercero y cuarto, 240 en segundo de ESO, 250 euros en cuarto y 250 euros en educación especial.

Cuidar el bien colectivo

Frente a las bondades del subrayado, la conselleira Sánchez Piñón destaca que este programa se enmarca en un principio de gratuidad en las etapas obligatorias «para favorecer la igualdad de oportunidades entre el alumnado e inculcar valores de solidaridad, conservación del material para su reutilización por otros y cuidado del bien colectivo». Destaca que Galicia es, con Castilla-La Mancha y Aragón, de las pocas comunidades que cubre de forma homogénea a todo el alumnado de ESO, con una gestión que también realizan Valencia o Madrid.

Los profesores contrarios al sistema de la Xunta creen que la gratuidad debería ser para quien lo necesite. Para las ayudas en educación infantil, concellos como el de Lugo las distribuirán, por un método progresivo, a familias de menor renta.