La vicepresidenta primera del Gobierno, Fernández de la Vega, afirmó ayer que una cosa son las creencias y otra los delitos al ser interrogada sobre las declaraciones del cardenal Antonio Cañizares en que relacionaba los abusos sexuales a menores con el aborto. «Una cosa son las creencias, otra los delitos y otra son las regulaciones que establece la ley para garantizar derechos y la dignidad de las mujeres en el caso de la interrupción voluntaria del embarazo», dijo. A juicio de la vicepresidenta, no tiene nada que ver el aborto con los abusos a menores.
«Los casos de violaciones en colegios católicos en Irlanda son execrables y constituyen un delito muy grave», explicó. Fernández de la Vega señaló además que la regulación de la interrupción voluntaria del embarazo se ha hecho en España «con respeto a los principios científicos, a la Constitución y a nuestra jurisprudencia».