Encuentra en Galicia el mejor producto para su restaurante japonés de Londres
![Alfonso Andrade Lago](https://img.lavdg.com/sc/XHT6DKu7BUvgZGIaG638Htahbp0=/75x75/perfiles/78/1478890772762_thumb.jpg)
SOCIEDAD
Su experiencia en el Tsunami londinense, restaurante que llegó a ser comparado con Nobu por su gran calidad, convirtió a Ni Lenette, británica originaria de isla Mauricio, en una cocinera de renombre en el Reino Unido. Pero hace unos años apagó los fogones y se embarcó en una cruzada personal en busca de la excelencia, un recorrido gastronómico que la llevó «por medio mundo». «América, el Índico, Malasia, Indonesia, China y Europa» centraron su búsqueda del mejor producto sobre la faz de la Tierra. Y finalmente lo encontró... «en Galicia».
Aquí se enamoró «de unos alimentos mágicos, increíbles», desde el marisco hasta las hortalizas, pasando por el vino o la carne, de la que dice estar «enamorada» y «entusiasmada» con sus posibilidades, porque le gusta «más que la de wagyu» y es «la mejor» que ha comido.
Lenette detuvo su búsqueda en Galicia, donde vio con claridad que había llegado a la meta, al final de su viaje. Fiel al protocolo, al arte y a la manera de hacer de la gastronomía japonesa, montará un restaurante de ese estilo en Londres, abastecido con producto gallego. Pero no será cualquier restaurante. Kouzu, que así se llamará, abrirá sus puertas a final de año en Grosvenor Gardens (Belgravia), una selecta zona de la capital, a la espalda del palacio de Buckingham. El local es un viejo banco, ahora remozado.
«Estará inspirado en Kioto y será una celebración de la belleza y la cultura de esa ciudad. La hospitalidad japonesa -precisa Lenette- es diferente al estilo occidental, y para mí es importante preservar esa tradición para conseguir que el cliente viva una experiencia única».
La chef resume así su planteamiento culinario: «Ternera gallega, vinos gallegos, con los que estoy maravillada; un montón de mariscos gallegos, verduras y hortalizas, huevos y pollos de Galicia y otras muchas cosas que aún me quedan por descubrir. Por tanto, he creado mi cocina japonesa de Kioto con productos gallegos».
La simbiosis galaico-nipona tiene para Ni un entronque casi místico: «La cultura gastronómica japonesa intenta que nada interfiera con los sabores naturales de los alimentos. Para ello necesita productos muy puros, los mejores. Galicia tiene mucho que ofrecer en ese sentido y complementa esta idea perfectamente. Además, su gente, su naturaleza y su cultura me inspiran». Los vinos autóctonos merecen para ella un capítulo especial. «Estoy completamente fascinada por estos vinos elegantes».