En la actualidad hay 828 entidades benéficas inscritas en la Xunta que movilizan a casi 40.000 personas
05 dic 2014 . Actualizado a las 08:43 h.Doce oenegés que movilizan a 162 voluntarios nacieron este año en la comunidad. El dato corrobora la tendencia que indica que Galicia es una tierra muy solidaria, pues desde el 2011, cuando arreciaba lo peor de la crisis, se han formado 82 nuevas entidades con más de 1.500 participantes. Las hay de todo tipo: para jóvenes, de corte ambientalista o de apoyo a enfermos o necesitados. En total, en Galicia hay 828 oenegés con 37.614 integrantes, una cifra que destaca la Xunta en el Día Internacional del Voluntariado.
Desde la Dirección Xeral de Xuventude y Voluntariado, de la Consellería de Traballo, se coordinan numerosos programas, y Beatriz Mato, titular de la cartera, resume así lo que aportan: «Eses esforzos, esas doses de solidariedade que nos regalan los voluntarios, son os que constrúen unha verdadeira sociedade do benestar. Poñen as bases dun crecemento sólido, dunha sociedade máis xusta e madura».
En cada ejercicio la Xunta añade nuevas ideas. En este mismo año se han puesto en marcha cinco proyectos: acompañamiento en el hospital psiquiátrico de Conxo, con 25 voluntarios; programa de intercambio juvenil internacional, que se desarrolla para ayudar a quienes visitan los albergues, y tiene 33 participantes; los Espazos Xoves de la red gallega de centros juveniles, donde 53 voluntarios ponen en marcha actividades de apoyo; acompañamiento hospitalario en Lugo; y ayuda también en hospitales a menores dependientes, proyecto al que se han anotado ya 97 voluntarios.
Son los últimos ejemplos de una larga lista que moviliza a miles de personas. Se atiende a enfermos de alzhéimer en las residencias y centros de día de la comunidad (181 inscritos) o se fomenta la lectura en las bibliotecas de Santiago, A Coruña, Lugo, Ourense, Pontevedra y Vigo, lo que moviliza a unos 250 voluntarios, además de programas específicos para enseñar el uso de tecnologías de la información en grupos en riesgo de exclusión.
Los presos también ayudan
Precisamente, uno de estos colectivos es el de presos, y para ellos también hay un proyecto de Benestar en el que participan 69 personas que viven en las cárceles de Monterroso, Teixeiro y Pereiro de Aguiar, además de los centros de inserción de Vigo y A Coruña. En este programa, llamado Voluntariado desde dentro, los presos son quienes ayudan, es decir, hacen trabajos útiles para la sociedad, lo que produce un doble beneficio, ya que al trabajo en sí se suma la percepción personal de ser valioso.