Físicos gallegos, en el experimento que recreará el instante inicial del «big-bang»
SOCIEDAD

El gran acelerador de partículas LHC dobla su energía para reproducirlo mejor
26 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Justo unas pocas millonésimas de segundo después del big-bang, el universo era como una gran sopa densa y caliente, que hervía a temperaturas cientos de miles de veces mayores que las del corazón del Sol. En ese estado partículas elementales como quarks y gluones fluían libremente antes de que el cosmos empezara a enfriarse y los gluones actuasen como un pegamento para mantener a los quarks unidos dentro de los protones y neutrones que forman la actual materia.
Recrear ese líquido inicial es el objetivo del Gran Colisionador de Hadrones (LHC), que ayer comenzó con la colisión de iones (átomos de plomo sin electrones) con el doble de energía de la utilizada hasta ahora, un récord tecnológico que ofrecerá a los científicos multitud de datos para abrir una nueva ventana a la física. Es una aventura que cuenta con una importante participación de físicos de la Universidade de Santiago, que participarán en dos de los cuatro grandes experimentos, Alice y LHCb, que estudiarán el plasma de gluones y quarks surgido justo en el inicio del universo.
«O primeiro período de funcionamento do LHC supuxo avances fundamentais na comprensión das propiedades do plasma de quarks e gluons, e agora o salto no nivel de enerxía rexistrado da acceso á resolución de preguntas máis fundamentais», explica Carlos Salgado, que lidera el proyecto HotLHC, dentro del experimento Alice, para analizar estos procesos.
«Paso a lo desconocido»
Después de la colisión de protones al doble de energía registrada en los últimos meses, ahora le toca el turno a los núcleos de plomo. Solo que ahora también se aumentará el volumen y la temperatura del líquido inicial del cosmos que se recreará con el choque de los iones, lo que permitirá avances importantes en el conocimiento de este medio. En el anterior ciclo de trabajo, con la mitad de la energía, se confirmó la existencia del llamado jet quenching, un fenómeno por el que las partículas producidas pierden energía por su paso a través del plasma de quarks y gluones. Las nuevas medidas que se empezaron a tomar ayer y que continuarán a lo largo de todo el mes permitirán una mejor caracterización de este estado de la materia.
Al análisis de los datos y detección de las colisiones se unirá por primera vez el experimento LHCb. «Este es un interesante paso hacia lo desconocido que puede identificar partículas de forma muy precisa», subrayó Guy Wilkinson, el portavoz de este equipo.